Un hemangioma es una tumoración o neoplasia vascular benigna formada por una acumulación normal de vasos sanguíneos. Los hemangiomas aparecen desde el nacimiento o durante las primeras semanas de vida, pueden seguir creciendo hasta el primer año de vida y desaparecer con el tiempo en un periodo de entre 3 a 10 años aproximadamente. Los hemangiomas pueden surgir en cualquier parte del cuerpo, pero se presentan con mayor frecuencia en el rostro, cabeza, cuello, pecho o espalda. Es más frecuente en niñas que en niños, en prematuros y nacimientos múltiples (gemelos, mellizos, etc.). Es una condición común y no es grave.
Existen dos tipos de hemangiomas:
No está claro por qué los vasos sanguíneos, normalmente densos, se agrupan en un área determinada causando un hemangioma. Se estima que puede haber un componente hereditario en la formación de estos tumores benignos. Algunos estudios sugieren que ciertas proteínas en la placenta pueden contribuir al desarrollo de hemangiomas durante el embarazo.
En la mayoría de casos, el hemangioma no suele presentar síntomas adicionales a la marca visible en la piel. Entre los síntomas de un hemangioma se pueden encontrar:
La mayoría de los hemangiomas no necesitan tratamiento, debido a que las marcas y tumores desaparecen por sí mismos. Se pueden presentar casos en que los hemangiomas crezcan en lugares que puedan causar problemas en la salud del niño, por ejemplo, cercano al ojo. En caso de tumores pequeños y superficiales se pueden aplicar medicamentos betabloqueantes en forma de gel sobre la lesión. Para los niños que no responden a los tratamientos con betabloqueantes o no los pueden usar, los corticosteroides pueden ser una opción. Se pueden inyectar en el nódulo, administrar por la boca o aplicar sobre la piel. También se puede utilizar la cirugía láser para eliminar estas lesiones.
Para el diagnóstico y tratamiento de un hemangioma se suele empezar con un simple chequeo físico, debido a que un hemangioma se diagnostica según su aspecto y color, pruebas adicionales, en la mayoría de los casos, no son necesarias. En algunos casos donde se presente un hemangioma cavernoso, es decir, que se encuentren en las capas más profundas de la piel, sí son necesarias algunas pruebas como una tomografía computarizada o una resonancia magnética.
Aún no se conoce un factor específico que pueda desencadenar un hemangioma.
Entre los factores que pueden aumentar el riesgo de tener un hemangioma se pueden encontrar:
Los hemangiomas suelen crecer sin producir reacciones o complicaciones alternas a la salud del niño, es decir, no presentan un riesgo mayor a la salud. Según dónde se encuentre el hemangioma, puede afectar la visión, la respiración, o la audición, aunque esto es muy raro. Las complicaciones de esta afección pueden incluir:
No se conocen formas efectivas de evitar esta afección, debido a que no se conocen causas exactas que puedan desarrollarlo.
Un hemangioma pertenece a las especialidades de medicina vascular y dermatología. La medicina vascular es la especialidad médica que se ocupa de la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y el seguimiento de los pacientes que sufren patologías vasculares, arteriales, venosas, linfáticas o de la microcirculación. La dermatología es la especialidad médica encargada de estudiar la estructura y funciones de la piel, así como los trastornos que la afectan y su prevención.
Es un tumor benigno de tipo cavernoso o capilar que reemplaza a la médula ósea. Los hemangiomas vertebrales no suelen ocasionar síntomas, salvo en algunas situaciones como en el embarazo, que por causas hormonales puede estimular el crecimiento.
Un hemangioma de la piel es una proliferación vascular, es decir, está formado por un conjunto de vasos sanguíneos que crecen de forma anómala en la piel.
El adenoma hepático es una proliferación benigna de hepatocitos, que suele presentarse en mujeres con antecedentes de toma prolongada de anticonceptivos orales. Es muy infrecuente en varones.
Un hemangioma óseo es una proliferación vascular, está formado por un conjunto de vasos sanguíneos que crecen de forma anómala en las estructuras óseas.
Un hemangioma en niños es una tumoración benigna formada por una acumulación normal de vasos sanguíneos. Los hemangiomas aparecen durante el primer año de vida y desaparecen con el tiempo, o simplemente permanecen como marcas de nacimiento.