Artículo especializado
Los Pilares más importantes de la Dieta Disociada
Cada día surgen dietas nuevas que prometen pérdidas de peso rápidas y sin esfuerzo. Las hay para todos los gustos, con nombre de famosa, basadas en un solo alimento, en la exclusión de unos cuantos… Pero, como en todo, se trata de no dejarse engañar y actuar con cabeza. Si queremos adelgazar sin riesgos nos pondremos en manos de profesionales sin caer en las modas de dietas que, como esta que nos ocupa, la dieta disociada, puede ir en contra de nuestro bienestar.
En qué se basa
La dieta disociada se basa en optimizar la digestión de los alimentos tratando de no mezclar diferentes tipos de suministros. El objetivo es ayudar a la digestión con una serie de medidas que permitan evitar en mayor o menor medida la mezcla de los principales macronutrientes en la digestión, dado que según dicha tendencia sustenta la hipótesis fisiológica de que nuestro sistema digestivo tiene cierta dificultad en asimilar conjuntamente las grasas, azúcares y proteínas, por lo que resulta más adecuado tratar de separar su ingesta en las comidas principales.
Otra idea relacionada en la que se fundamenta éste método es que cada alimento requiere de un pH diferente en el estómago para ser digerido, diversos tipos de enzimas y un tiempo de absorción diferente por lo que si agrupamos en las comidas alimentos que requieran pH similares, ayudaremos a su correcta digestión .
Categorías de los alimentos según esta dieta
Hidratos de carbono : arroz, pasta, pan, harina, maíz, cereales, legumbres, garbanzos, frijoles, lentejas, habas, soja, etc.
Proteínas: carnes, pescados, mariscos, leche, queso, yogur y otros productos lácteos, y huevos.
Grasas: aceite de oliva, aceite de girasol, frutos secos como avellanas, nueces o cacahuetes, coco…
Verduras: lechugas, espinacas, acelgas, tomates, coliflor, brócoli, berenjenas, calabacín, pimientos, espárragos, zanahoria, pepino, cebolla, ajo, puerro, apio.
Frutas: naranja, mandarina, limón, pomelo, pera, kiwi, plátano, piña, mora, sandía, frambuesa, cereza, fresa, arándano, manzana, uva, melón, albaricoque, melocotón, caqui.
Frutas ácidas : naranja, mandarina, limón, pomelo.
Frutas semi-ácidas : cereza, mora, frambuesa, fresa, arándano, kiwi, albaricoque, melocotón, piña, sandía, melón, manzana, caqui.
En base a la clasificación de alimentos se establecen una serie de premisas que permiten la ingesta de los alimentos que se deseen siempre y cuando pertenezcan a un mismo grupo. También existen algunas otras reglas de mezclas entre subgrupos:
No combinar carbohidratos con proteínas.
La fruta se debe consumir fuera de las comidas principales.
No mezclar frutas dulces con ácidas .
No combinar hidratos de carbono con ácidos o dulce s.
No combinar frutas dulces con proteínas .
No combinar azúcares con grasas .
No combinar vegetales salados y amargos con frutas muy dulces .
No combinar dos féculas o legumbres (lentejas con arroz, arroz y patatas).
No combinar dos proteínas de orígenes diferentes (carne y pescado).
No se pueden tomar bebidas gaseosas ni zumos en las comidas .
Se puede usar cualquier tipo de especia o hierba aromática en las preparaciones .
No están permitidos el azúcar y el alcohol .
Menú tipo de un día de dieta disociada
Desayuno: infusión, yogur con muesli y fruta fresca.
Media mañana : fruta a voluntad.
Comida : Ensalada variada. espinacas con patatas. Infusión.
Merienda : fruta a voluntad.
Cena: caldo de verduras y ave. Pollo al horno con pimientos asados.
¿Qué pasa con los hidratos y las proteínas?
Según los fundamentos de la dieta disociada, el hecho de no combinar los hidratos de carbono y las proteínas se basa en que el estómago necesita un pH diferente para la digestión de cada uno de ellos. Las proteínas necesitan un medio ácido en el estómago mientras que los hidratos necesitan un medio alcalino. Al ingerir proteínas, el estómago genera ácidos gástricos que activan la pepsina causante de la paralización de la digestión de los hidratos de carbono por lo que la digestión se hace más lenta y, por tanto, se produce una evacuación tardía.
EL PAPEL DE LAS FRUTAS
Según los fundamentos de la dieta disociada las frutas se deben ingerir fuera de las comidas, excepto la manzana, que se considera neutra y se puede tomar en las comidas.
Tampoco se deben mezclar frutas dulces con ácidas ya que las digestiones de ambas son diferentes. Y en cuanto al hecho de no combinar frutas dulces con proteínas es debido a que las frutas dulces tienen una fácil digestión y las proteínas no por los que los azúcares quedan retenidos en un medio caliente y húmedo por lo que se produce una fermentación y como consecuencia hinchazón y una digestión lenta.
Criterio de una nutricionista
Tras exponer los principios básicos de la dieta disociada haré varios comentarios al respecto:
No existe ninguna base científica que avale este tipo de dieta .
La alimentación humana consta de multitud de alimentos que , por su naturaleza, confieren una composición y proporción variable de los tres macronutrientes (proteínas, glúcidos y grasas) por lo que nuestro sistema digestivo es totalmente capaz de digerir y asimilar mediante jugos digestivos y enzimas específicos cada uno de los sustratos mencionados sin ningún problema siempre y cuando se goce de buena salud.
No es necesario establecer fórmulas complicadas en la combinación de los grupos de alimentos para entender el equilibrio adecuado alimentario que se debe seguir.
En todas las comidas inevitablemente se mezclan diferentes nutrientes y esto nos asegura estar incorporando en nuestra dieta todos los macronutrientes necesarios y una combinación de elementos de buen valor nutricional.
Motivos por los que puede funcionar
Existen varias razones por las que se puede adelgazar siguiendo una dieta disociada, aunque lo que sucede en realidad es que no se consigue por la propia dieta en sí, sino porque se ingieren menos calorías.
Por un lado, si se sigue una dieta disociada hipocalórica se va a conseguir una bajada de peso debido a un balance calórico diario inferior a la tasa metabólica o déficit energético, independientemente de mezclar o no los nutrientes.
En otras ocasiones, este tipo de dietas también llega a funcionar por el hecho de que muchas veces logran crear cierta monotonía en las comidas, lo que lleva a que finalmente se coma menos por puro aburrimiento.
La conclusión…
La mejor tendencia alimentaria es aquella que incluye todo tipo de alimentos naturales , y estos se consiguen mediante nuestros recursos naturales como son: frutas, vegetales, hortalizas, pescados y mariscos, carnes de calidad (sin procesar), grasas naturales (olivas, aguacate, aceites de prensada en frío…), lácteos enteros y derivados y cereales integrales. Y limitar los procesados que incluyan formulas ricas en azúcares, sal y conservantes artificiales dado que estos no son identificados como portadores de salud.
Hay que concienciarse de que no existen fórmulas mágicas más allá de la voluntad de poner en práctica de forma habitual hábitos, formas de alimentarse y estilos de vida saludables y adaptados a cada caso por sus características personales.