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¿Cómo prevenir lesiones musculoesqueléticas en el trabajo?

Fisioterapia en el Trabajo

El bienestar en el entorno laboral va mucho más allá de la simple gestión del tiempo o la optimización de procesos. Cuidar de la salud física de los equipos es clave para que se sientan motivados y puedan rendir al máximo. Por ello, hoy abordamos un tema muy relevante: la prevención de lesiones musculoesqueléticas. Estas dolencias pueden afectar a cualquier trabajador, pero sobre todo a aquellos que enfrentan tareas repetitivas o pasan largas horas en una misma postura.


Desde la identificación temprana de síntomas hasta la implementación de prácticas ergonómicas, en Savia Salud Digital MAPFRE resaltamos la importancia de contar con servicios especializados, como la Fisioterapia, para mantener un entorno laboral saludable.



¿Cómo prevenir lesiones musculoesqueléticas en el trabajo?

¿Qué son las lesiones musculoesqueléticas?


Las lesiones  o trastornos musculoesqueléticos son problemas que afectan a huesos, músculos, tendones, ligamentos y articulaciones. En pocas palabras, son afecciones de los sistemas musculares o esqueléticos que se originan por el esfuerzo continuo o por posturas inadecuadas.


Las más comunes en el entorno laboral son la tendinitis, el síndrome del túnel carpiano o la lumbalgia (dolor lumbar). Estas dolencias constituyen la principal causa de discapacidad en todo el mundo, suponiendo un gasto del 1,6 % del PIB.


En consecuencia, no es de extrañar que la fisioterapia resulte fundamental en este proceso. Un tratamiento adecuado, además de aliviar el dolor, ayuda a corregir la postura y prevenir futuros episodios.


Síntomas de las enfermedades musculoesqueléticas


Reconocer las primeras señales de alerta es vital para actuar a tiempo y evitar complicaciones. Los síntomas de las enfermedades musculoesqueléticas suelen manifestarse de varias formas, pero entre los indicios más comunes encontramos:


  • Dolor persistente: Ya sea en la espalda, cuello o extremidades.
  • Rigidez en las articulaciones: La dificultad para mover ciertas partes del cuerpo puede ser un claro aviso.
  • Inflamación: Hinchazón en articulaciones o tejidos blandos.
  • Sensación de debilidad o fatiga muscular: Especialmente después de realizar tareas repetitivas o prolongadas.
  • Entumecimiento o cosquilleo: En manos o pies, señal de que puede haber presión sobre nervios.

Establecer protocolos de revisión, como los reconocimientos médicos, y promover la comunicación abierta sobre la salud laboral ayuda a identificar estos síntomas antes de que se conviertan en problemas mayores.


Causas de las lesiones musculoesqueléticas en el trabajo


Las condiciones y el entorno laboral juegan un papel decisivo en las causas de las lesiones musculoesqueléticas, donde las más comunes son:


  • Posturas inadecuadas: Pasar horas frente al ordenador sin ajustar la silla o el escritorio puede causar tensiones musculares.
  • Movimientos repetitivos: Acciones como teclear o usar el ratón de manera constante pueden generar microtraumatismos.
  • Manipulación de cargas: Levantar objetos sin la técnica adecuada aumenta el riesgo de sufrir lesiones.
  • Falta de pausas activas: No interrumpir la jornada para estirarse o moverse es otra causa importante.
  • Estrés laboral: El estrés y la tensión emocional se reflejan en el cuerpo, provocando rigidez y molestias.
  • Estilo de vida: La falta de actividad física, el sobrepeso y las malas posturas pueden contribuir al desarrollo de estas enfermedades.

Prevención de lesiones musculoesqueléticas: Consejos y estrategias


Prevenir es siempre mejor que curar. La implementación de estos consejos y estrategias puede transformar el ambiente laboral y mejorar la calidad de vida de todos los trabajadores.


  • Adapta la ergonomía en el puesto de trabajo: Una silla ajustable, mesas regulables y soportes para pantallas ayudan a mantener una postura correcta.
  • Promueve las pausas activas: Realizar ejercicios sencillos, estiramientos o incluso breves caminatas cada 60 o 90 minutos para reducir la fatiga y la tensión muscular.
  • Realiza formaciones periódicas: La información sobre los síntomas de las enfermedades musculoesqueléticas y la forma de cuidarse se vuelve un aliado indispensable en la prevención de lesiones.
  • Establece evaluaciones de salud regulares: Estas evaluaciones pueden incluir desde revisiones posturales hasta análisis de la tensión muscular. Contar con el apoyo de profesionales como los de Savia es clave para intervenir de forma temprana.
  • Fomenta la actividad física: Incentivar la práctica regular de ejercicio no solo fortalece la musculatura, sino que también reduce el riesgo de lesiones.
  • Incorpora servicios de fisioterapia: Un servicio de fisioterapia especializado permite diseñar programas personalizados de rehabilitación y prevención. Esto es especialmente útil para corregir posturas y fortalecer áreas vulnerables.
  • Ajusta las cargas de trabajo: La distribución equitativa de las actividades y la rotación de funciones pueden reducir el impacto de los movimientos repetitivos. Además, es importante analizar si la demanda laboral es acorde a las capacidades de cada trabajador.

Este artículo reúne herramientas prácticas y claras para abordar la salud física en el trabajo. Adoptar una cultura preventiva es una inversión que se refleja en todos los aspectos de la organización. Desde Savia, salud digital MAPFRE, te ayudamos a construir espacios laborales donde la prevención de lesiones musculoesqueléticas sea parte del día a día, garantizando un futuro más saludable y productivo para todos. Infórmate sin compromiso.

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Higiene postural en el trabajo
Higiene postural en el trabajo
Mantener una buena postura no es solo cuestión de comodidad, es salud. Pasar horas frente a un ordenador, estar de pie o realizar movimientos repetitivos sin la técnica adecuada puede provocar dolores que se cronifican con el tiempo. La higiene postural surge precisamente como respuesta y solución ante los posibles dolores cervicales, tensión lumbar o rigidez en los hombros. En este artículo te descubrimos el conjunto de hábitos que ayudan a proteger la espalda, prevenir lesiones y mejorar el bienestar general de los empleados. ¿Qué es la higiene postural? Cuando hablamos de higiene postural nos referimos al conjunto de hábitos y recomendaciones que permiten proteger la columna y las articulaciones en las actividades diarias. La higiene postural tiene como objetivo principal evitar sobrecargas, lesiones musculares y dolores crónicos que suelen derivar de malas posturas. Esto no significa estar en una postura rígida. La higiene postural consiste en aprender a moverse, sentarse y levantar objetos de forma consciente y saludable, manteniendo el cuerpo alineado. Ejemplos de higiene postural Entender qué es la higiene postural y cómo podemos aplicarla en el día a día es más sencillo a través de los siguientes ejemplos: Si estás sentado : mantén la espalda recta apoyada en el respaldo, los pies firmes en el suelo y las rodillas a 90 grados. Si estás delante del ordenador : sitúa la pantalla a la altura de los ojos, evitando inclinar el cuello hacia adelante. Si vas a levantar peso : flexiona las rodillas y mantén la carga cerca del cuerpo en lugar de doblar la espalda. Si vas a estar de pie mucho tiempo : distribuye el peso de manera equilibrada en ambas piernas, evitando posturas forzadas. Al dormir : evita dormir boca abajo, ya que así se altera la curvatura lumbar de la columna. Es importante que el cuello y la cabeza estén alineados con el resto de la columna. Higiene postural en el trabajo La higiene postural en el trabajo cobra especial relevancia en los entornos de oficina, donde el sedentarismo y las jornadas frente al ordenador afectan directamente a la salud musculoesquelética . En puestos de oficina es clave aplicar la higiene postural al estar sentado . Es decir, mantener la espalda erguida, evitar cruzar las piernas y hacer pausas activas cada hora y media. En trabajos que implican esfuerzo físico, la higiene postural implica conocer la técnica adecuada para empujar, cargar o manipular materiales. Invertir en ergonomía —sillas regulables, escritorios adaptados o accesorios como reposapiés— es una medida preventiva que demuestra compromiso con el bienestar de los trabajadores. Cómo promover la higiene postural en el trabajo Fomentar estos hábitos no depende únicamente de cada empleado. Las empresas tienen un papel clave al incluir la higiene postural en el trabajo dentro de sus políticas de salud y bienestar laboral: Programas de formación : impartir talleres prácticos de fisioterapia y ergonomía que enseñen la postura correcta para cada tarea. Revisiones periódicas : detectar de forma temprana posibles problemas de columna o sobrecarga muscular. Pausas activas guiadas : incorporar rutinas de estiramientos breves durante la jornada. Entornos ergonómicos : invertir en equipamiento adecuado y ajustado a las necesidades de cada trabajador, evitando los riesgos ergonómicos . La higiene postural se ha convertido en una herramienta esencial para garantizar la salud física de los trabajadores y reforzar la cultura de bienestar en la empresa. Invertir en higiene postural para la espalda significa prevenir lesiones, reducir el absentismo y aumentar la productividad. En Savia, salud digital MAPFRE , ponemos a disposición de las empresas servicios especializados de fisioterapia y programas de bienestar laboral para guiar a los equipos en la adopción de buenos hábitos posturales. Cuidar la postura es, en definitiva, cuidar de las personas y del futuro de la organización.

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