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Síndrome de Tourette
Enfermedad

Síndrome de Tourette

¿Qué es el síndrome de Tourette? El síndrome de Gilles de la Tourette o síndrome de Tourette (ST), es un trastorno neurológico que se suele manifestar en la niñez , caracterizado por la realización de movimientos repetitivos o sonidos involuntarios (tics o espasmos). Son ejemplos de estos espasmos: parpadeo constante, muecas, contracción de la nariz, dar pisotones, gruñir, gritar, insultar, saltar, toser, ladrar, etc. Aunque los síntomas varían de una persona a otra, la mayoría de casos son leves, y los tics suelen desaparecer con el paso de los años, generalmente al alcanzar la mayoría de edad. Tipos de tics Cabe destacar que, dentro de los diferentes tipos de tics, estos pueden ser movimientos (tics motores o motrices) o sonidos (tics vocales). Los tics motores suelen comenzar antes que los vocales. Los diferentes tipos de tics se clasifican principalmente en: Tics simples: son tics repentinos y breves que implican un número limitado de músculos. Por ejemplo: hacer muecas o gruñir. Tics complejos: son movimientos coordinados que involucran varios grupos musculares. Por ejemplo: tocar reiteradamente a alguien o gritar. Los tics pueden ser, a su vez, persistentes o crónicos o, por el contrario, tics transitorios. Causas de un síndrome de Tourette No se conoce la causa exacta del síndrome de Tourette ya que es un trastorno complejo , probablemente, de origen genético o heredado y potenciado con ciertos factores ambientales. Algunas investigaciones apuntan a un desequilibrio en los neurotransmisores del cerebro. Síntomas de un síndrome de Tourette Los síntomas específicos del ST son los denominados tics (movimientos o sonidos repentinos), breves e intermitentes. Estos pueden ser leves o graves. Cuando son graves, pueden interferir en la comunicación, la funcionalidad habitual y la calidad de vida del paciente. Antes de aparecer los tics, la persona puede sentir un incómodo impulso premonitorio como cosquilleo o tensión y, cuando aparece el tic, se siente alivio. El niño puede llegar a controlar el tic si hace un gran esfuerzo, pero esto puede impedirle concentrarse en otro aspecto como prestar atención en clase o mantener una conversación. Tratamiento de un síndrome de Tourette El síndrome de Tourette no tiene tratamiento. Los tics suelen desaparecer con el paso de los años. El tratamiento se pauta exclusivamente cuando los tics son graves e interfieren con la vida cotidiana de quien lo padece, para aliviar estos síntomas tan molestos. Existen algunos medicamentos que pueden ayudar a controlar los tics, estos deben ser pautados por el médico según cada paciente, debido a sus posibles efectos secundarios: Medicamentos bloqueadores o que disminuyen la dopamina: la flufenazina, el haloperidol, la risperidonea, la pimozida o la tetrabenazina. Inyecciones de toxina botulinica o bótox: una inyección en el músculo afectado puede reducir un tic simple o vocal. Medicamentos contra el déficit de atención o hiperactividad: estimulantes como el metilfenidato y medicamentos para aumentar la atención y la concentración. Inhibidores adrenérgicos centrales: fármacos como la clonidina y la guanfacina pueden controlar la conducta, los impulsos y los ataques de ira. Antidepresivos: la fluoxetina (Prozac y Sarafem, entre otros). Medicamentos anticonvulsivos: topiramato. Para reducir los tics, se recomienda realizar actividades tranquilas y focalizadas, y acudir a grupos de apoyo o seguir terapias como: Terapia del comportamiento: mediante intervenciones cognitivas conductuales para controlar los tics e identificar los impulsos premonitorios. Psicoterapia: para aumentar su autoestima y ayudar a afrontar el ST, así como otras condiciones que pueden afectar a la conducta como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, la depresión o la ansiedad y las obsesiones. Estimulación cerebral profunda (DBS): solo en casos de tics graves que no responden a otro tratamiento. Este método proporciona estimulación eléctrica, mediante un dispositivo implantado en el cerebro, a zonas específicas que controlan el movimiento. Este método todavía requiere más investigaciones para determinar si es un tratamiento seguro y eficaz para el ST. Además, es muy importante que los padres del niño hablen con sus profesores y su entorno, para que apoyen y entiendan la situación y tratar de que el niño no se sienta avergonzado, frustrado o estresado. Pruebas complementarias de un síndrome de Tourette No existe una prueba específica para diagnosticar el síndrome de Tourette. El diagnóstico se basa en la historia clínica de los síntomas y antecedentes familiares. Para que alguien reciba el diagnóstico del Síndrome de Tourette, debe cumplir los siguientes criterios durante al menos 1 año: Tener 2 o más tics motores y al menos 1 vocal. No tienen por qué ocurrir a la vez, y pueden surgir muchas veces al día, todos los días o sólo esporádicamente durante el año. Haber empezado antes de los 18 años. No estar relacionados los síntomas con el consumo de medicamentos, drogas u otras patologías como enfermedad de Huntington, convulsiones o encefalitis postviral. No obstante, los síntomas de esta enfermedad pueden imitar a los de otras enfermedades, por ello y para descartar otras afecciones, el médico puede solicitar pruebas complementarias como: análisis de sangre o estudios de diagnóstico por imágenes tales como resonancia magnética, tomografía computada o electroencefalograma. Factores desencadenantes de un síndrome de Tourette Los factores desencadenantes de tics más graves o frecuentes en este trastorno, son el estrés o la ansiedad, la emoción y la preocupación. También pueden empeorar al enfermar. Factores de riesgo de un síndrome de Tourette Los siguientes factores de riesgo pueden relacionarse con el Síndrome de Tourette, aunque todavía se requieren más investigaciones: Antecedentes familiares Fumar durante el embarazo Complicaciones durante el embarazo Bajo peso al nacer Infecciones Sexo masculino (tienen más probabilidades de desarrollarlo que el sexo femenino) Complicaciones de un síndrome de Tourette Normalmente, las personas con síndrome de Tourette pueden llevar una vida sana y activa, pero con frecuencia, afecta al comportamiento, a la conducta y a la autoestima. Entre las enfermedades que suelen asociarse con el síndrome de Tourette destacan: Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) Trastorno del espectro autista Trastornos del sueño Dificultades de aprendizaje Trastornos de ansiedad o depresión Dolor relacionado con los tics, en especial, dolor de cabeza Dificultad para manejar la ira Prevención de un síndrome de Tourette Este síndrome no se puede prevenir, pero sí se puede ayudar al paciente a disminuir los tics y a sobrellevar este molesto problema explicando y comunicando a su entorno acerca del síndrome, con el fin de aumentar la comprensión y recibir apoyo sobre los síntomas, y reducir las burlas y el estrés del paciente . A veces, el tratamiento de otras afecciones concurrentes como TDAH o TOC, puede ayudar a reducir los tics. Especialidades a las que pertenece Las especialidades médicas a las que pertenece el Síndrome de Tourette es la neurología (médicos especializados en trastornos cerebrales y del sistema nervioso), también la psiquiatría y psicología. Preguntas frecuentes ¿Qué cromosoma afecta en el síndrome de Tourette? Todavía se están realizando estudios para determinar las causas y origen del ST, unos estudios lo relacionan con un cromosoma mientras que otros creen que es afectado por otro, según cada caso examinado. El gen responsable del ST parece localizarse en el cromosoma 18q22. También se han identificado mutaciones que afectan al gen SLITRK1, en un pequeño número de personas, situado en el brazo largo del cromosoma 13 (13q31.1), que codifica una proteína que es activa en el cerebro. Además, es posible que una mutación en el gen HDC pueda ser la causa de los síntomas típicos del ST, este gen interfiere en la producción de histamina. ¿Qué son los tics motores? Los tics motores o motrices son aquellos movimientos involuntarios, repentinos, rápidos y recurrentes que tiene una persona, especialmente en niños y adolescentes. Pueden afectar a un grupo complejo de músculos, aunque generalmente comienzan por la cara y músculos del cuello y, si progresan, se extienden a las extremidades superiores y posteriormente, a las inferiores. Son tics motores el parpadeo constante de ojos, encogimiento de hombros, incluso autolesiones como arañarse, etc. ¿Qué es el Síndrome de Rett? El síndrome de Rett es un trastorno neurológico y del desarrollo infantil de origen genético, caracterizado por una evolución normal durante los primeros meses de edad, pero seguido de un mal desarrollo del cerebro, con movimientos anormales de las manos y la pérdida de tono muscular. Además, presenta una disminución progresiva de habilidades motoras y de comunicación. Este síndrome puede causar también convulsiones y discapacidad intelectual. El Síndrome de Rett es poco frecuente y afecta principalmente a niñas alrededor de los 2 años de edad . ¿Cuáles son los diferentes tipos de autismo? Existen diferentes tipos de trastorno de autismo: Autismo o síndrome de Kanner: es una enfermedad en la que existe una limitada conexión emocional con el resto de individuos, el individuo es poco sociable, como si estuviese en su propio mundo. Aparecen durante los 3 primeros años de vida. Quien lo padece suele mostrar comportamientos repetitivos y se estresan o agitan ante ruidos o luces brillantes. Síndrome de Asperger: es el más difícil de diagnosticar. Individuos con este síndrome presentan una inteligencia media-alta pero un déficit serio en sus habilidades sociales y de comportamiento. No suelen ser empáticos, tienen poca coordinación, se obsesionan con algunos temas y no entienden las ironías. Trastorno desintegrador infantil o síndrome de Heller: se diferencia de los anteriores en que suele aparecer a los 2 años de edad de forma repentina y regresiva y el niño puede llegar a darse cuenta. Es menos frecuente que el autismo, pero con un pronóstico peor. Síndrome de Rett: se presenta sobre todo en niñas sobre los 2 años de edad. Tiene un proceso degenerativo y progresivo del sistema nervioso con alteraciones en el habla, la motricidad, etc. Trastorno generalizado del desarrollo no especificado: se denomina así a los síntomas clínicos del espectro autista que son demasiado heterogéneos y no se pueden categorizar en ninguna de las tipologías anteriores. ¿Cuál es la diferencia entre Autismo y Asperger? La diferencia principal entre ambas patologías radica en que, en el autismo, las alteraciones son muy evidentes durante los 3 primeros años de vida, mientras que en el Asperger no hay evidencia tan clara y se tarda más en diagnosticar. Existen otras diferencias clave como: Autismo: tienen una inteligencia por debajo de lo normal, un desarrollo físico adecuado, presentan retraso en el lenguaje y un vocabulario limitado, no tienen interés en las relaciones sociales, etc. Asperger: tienen una inteligencia por encima de lo normal, presentan retraso motor y torpeza a nivel general, un lenguaje normal incluso con un vocabulario culto, buena memoria, sí desean relacionarse y tener amigos, pero tienen dificultades sociales, desarrollan intereses obsesivos, etc.
Trastorno Obsesivo Compulsivo
Enfermedad

Trastorno Obsesivo Compulsivo

¿Qué es el trastorno obsesivo compulsivo? El trastorno obsesivo compulsivo es un tipo de desorden de ansiedad que se caracteriza por la aparición de pensamientos repetitivos no deseados y compulsiones excesivas e irracionales generando inquietud, ansiedad y temor . Dentro de los problemas de ansiedad, es uno de los trastornos que se presentan con mayor frecuencia y, muchas veces, altera las relaciones sociales, de trabajo y estudio. Se manifiesta de forma frecuente en la infancia y la adolescencia con una evolución progresiva. Es una enfermedad común y crónica que si no se trata adecuadamente puede afectar a la calidad de vida de la persona que lo padece. Tipos de trastorno obsesivo compulsivo Existen tres tipos de trastorno obsesivo-compulsivo: Trastorno obsesivo-compulsivo relativo a los pensamientos obsesivos. Trastorno obsesivo-compulsivo relativo a conductas obsesivas. Trastorno obsesivo-compulsivo relativo tanto a los pensamientos obsesivos como a las conductas obsesivas. Otros trastornos obsesivo-compulsivo (TOC) frecuentes son: TOC de relaciones/amor: obsesiones y dudas constantes sobre relaciones, frecuentemente hacia la pareja. TOC sexual: pensamientos y obsesiones sobre su sexualidad y conducta sexual hacia los demás. TOC religioso: miedo profundo a pecar, blasfemar, a no ser lo suficientemente “buena persona”, tienen dudas sobre si sus acciones son por voluntad propia o voluntad de Dios. TOC de contaminación: miedo excesivo a la contaminación o contagio de alguna enfermedad, por lo que se desencadena una obsesión por la limpieza e higiene personal. TOC agresivo: pensamiento convertido en obsesión acerca de que el paciente puede hacerle daño a las personas que lo rodean. TOC de perfección, orden y simetría: obsesión y compulsión sobre la forma rígida y correcta con que debería ser o hacer algo, obsesiones sobre el orden y clasificación de las cosas. TOC somáticos: pensamientos obsesivos sobre su salud. Causas del trastorno obsesivo compulsivo No se conocen las causas exactas del trastorno obsesivo compulsivo, pero se han identificado algunos factores entre los cuales se encuentran alteraciones en el lóbulo frontal, factores genéticos o alteraciones en la secreción de serotonina. La mayoría de veces puede ser una combinación de causas y un factor desencadenante que origina la aparición de los síntomas. Síntomas del trastorno obsesivo compulsivo Entre los síntomas generales se encuentran la sensación de angustia, agitación, nerviosismo, mareos, taquicardia, insomnio, cefalea, náuseas, sequedad de la boca, visión borrosa, sudoración, parestesias, sensación de desrealización y despersonalización . Las obsesiones se manifiestan con ideas, impulsos y pensamientos repetitivos que causan miedo y ansiedad . Las compulsiones tienen como síntomas las conductas repetitivas, rígidas y estructuradas que tratan de controlar las obsesiones . Tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo El tratamiento se basa principalmente en dos vertientes, farmacológico y conductual. Tratamiento farmacológico: los antidepresivos de la clase de inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina son los únicos antidepresivos recomendados en conjunto con terapia conductual para el tratamiento de este síndrome. Es importante recalcar que entre las limitaciones del tratamiento se encuentra el hecho de que al omitir el mismo, los síntomas vuelven a aparecer por lo que deben ingerirlo de por vida. Tratamiento cognitivo conductual: este ha demostrado menor índice de recaídas que el tratamiento farmacológico. Existen diferentes métodos, entre los cuales destacan la exposición con prevención de respuesta en el que se utilizan rituales neutralizadores o la terapia de aceptación, compromiso en el que el objetivo es la aceptación de las sensaciones de ansiedad para que esta no interfiera en su vida. Actualmente, es cada vez más frecuente utilizar también el mindfulness o técnica de atención plena como tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo, permitiendo reconocer las experiencias internas para no magnificarlas, sino más bien aceptarlas, resistiéndose a cambiarlas por compulsiones. Pruebas complementarias del trastorno obsesivo compulsivo Aunque no existe una prueba específica para diagnosticar este trastorno , el médico especialista, después de realizar pruebas o test de salud mental, puede sugerir alguna prueba especial como puede ser un electroencefalograma, resonancia magnética cerebral, niveles de serotonina o pruebas hormonales para poder confirmar diagnósticos diferenciales. Factores desencadenantes del trastorno obsesivo compulsivo Existen muchas teorías sobre qué desencadena este trastorno. La más aceptada es que pueden existir factores genéticos o físicos que predisponen al individuo a padecer esta enfermedad, y sea un factor ambiental el detonante en la aparición de los síntomas. Algunos de los detonantes pueden ser: Enfermedades agudas o crónicas Fallecimiento de personas queridas Abandono Víctimas de abuso físico, sexual o emocional Cambios significativos en los que no existe sentido de control, como puede ser cambios de país en niños Niveles de estrés excesivos Factores de riesgo del trastorno obsesivo compulsivo. Los factores de riesgo de esta enfermedad son los mismos factores desencadenantes . Complicaciones del trastorno obsesivo compulsivo El trastorno obsesivo compulsivo se puede complicar con depresión, problemas en su entorno social y familiar hasta casi presentar un aislamiento global. Prevención del trastorno obsesivo compulsivo No existe manera de prevenir la enfermedad con alguna medida farmacológica conductual , pero es importante al momento de presentar los síntomas, acudir al especialista oportunamente para su tratamiento. Especialidades a las que pertenece El trastorno obsesivo compulsivo pertenece a la especialidad de psiquiatría y psicología , aunque también en ocasiones puede colaborar neurología. Preguntas frecuentes ¿Qué son los pensamientos obsesivos? Son pensamientos recurrentes, persistentes e intrusivos que causan ansiedad en un individuo con preocupación excesiva sobre un problema de la vida real.   ¿Qué es una persona bipolar? Es una persona con una enfermedad mental en la cual existen marcados y extremos estados de ánimo como pasar de la alegría a la tristeza sin razón aparente. ¿Qué es la rumiación mental? Es un tipo de pensamiento estático y cerrado sobre un tema en el que la persona es incapaz de eliminar el proceso repetitivo de pensamiento, con lo cual hace que crezcan los niveles de ansiedad. ¿Qué son los trastornos disociativos? Son trastornos mentales en los cuales existe falta en la continuidad de los pensamientos, acciones e identidad, ocasionando problemas con su reconocimiento como persona y en su entorno de forma involuntaria.    ¿Qué es la escisión en psicología? La escisión en psicología es la división o separación del pensamiento entre lo bueno y lo malo . Es considerado un mecanismo de defensa, el cual se manifiesta por la incapacidad que tiene el individuo para percibir ciertos componentes positivos y negativos de una situación.
Síndrome Serotoninérgico
Enfermedad

Síndrome Serotoninérgico

¿Qué es el síndrome serotoninérgico? El síndrome serotoninérgico es un síndrome inducido por drogas que se caracteriza por un conjunto de efectos adversos causados por el aumento de su concentración en el sistema nervioso central. La serotonina es un neurotransmisor que produce el cuerpo y que es necesario para el buen funcionamiento del organismo por diversas razones ya que se encarga de regular ciertos procesos fisiológicos.  El exceso de serotonina provoca el síndrome serotoninérgico. En el sistema nervioso central la serotonina es un neurotransmisor con muchos efectos, entre ellos: modificación del humor, sueño, vómitos y dolor . Muchas drogas tienen influencia sobre la neurotransmisión serotoninérgica. Dentro de este tipo de sustancias podemos incluir los antidepresivos, los ansiolíticos, las drogas antimigrañosas, y los antieméticos. El exceso de estimulación de la serotonina sobre los receptores postsinápticos a nivel central y periférico tiene efectos negativos para el organismo. Pueden llegar a ser muy graves e incluso mortales. Tipos de síndromes más comunes No existen diferentes tipos de síndromes comunes para esta patología. Causas del síndrome serotoninérgico La acumulación excesiva de serotonina en el organismo crea los síntomas del síndrome serotoninérgico. En circunstancias normales, las neuronas del cerebro y de la médula espinal producen serotonina que ayuda a regular la atención, el comportamiento y la temperatura corporal. En otras neuronas del cuerpo, principalmente de los intestinos , también producen serotonina. Si bien es posible que tomar un solo medicamento que aumenta los niveles de serotonina puede causar el síndrome de la serotonina en personas vulnerables, este trastorno aparece con más frecuencia cuando se combinan ciertos medicamentos. Otra causa del síndrome de la serotonina es la sobredosis intencional de medicamentos antidepresivos. Las drogas ilegales y los suplementos dietéticos también pueden estar asociados con el trastorno. Síntomas del síndrome serotoninérgico Los síntomas del síndrome serotoninérgico comienzan a las pocas horas de la sobredosis o la interacción entre fármacos que aumentan la presencia de serotonina. Los síntomas pueden incluir: ne rviosismo o inquietud, confusión, frecuencia cardíaca acelerada y presión arterial alta , pupilas dilatadas, pérdida de coordinación muscular o espasmos musculares, rigidez muscular, sudoración intensa, diarrea, dolor de cabeza, escalofríos, fiebre alta, convulsiones, latidos del corazón irregulares, inconsciencia o piel de gallina, entre otros síntomas. Tratamiento del síndrome serotoninérgico Para tratar el síndrome serotoninérgico adecuadamente es necesario tener una historia farmacológica actualizada del paciente. Por lo general, las formas más leves del síndrome de la serotonina desaparecen a las 24 o 72 horas de haber suspendido el medicamento que aumenta la serotonina y mediante la administración de medicamentos para bloquear los efectos de la serotonina que ya están en el organismo. Esto último solo si fuera necesario. Los casos graves requieren hospitalización inmediata y cuidados intensivos, pues el paciente puede sufrir hipertermia severa, rabdomiólisis o insuficiencia respiratoria. Para el tratamiento, incluso en casos leves, es habitual la administración de benzodiazepinas para disminuir la agitación, los movimientos pseudo convulsivos y la rigidez muscular. La correcta hidratación , el control de la inestabilidad autonómica o de la fiebre es habitual como medida de apoyo. Sin embargo, los síntomas del síndrome de la serotonina provocados por algunos antidepresivos podrían tardar varias semanas en desaparecer por completo. Estos medicamentos permanecen en el organismo durante más tiempo que otros medicamentos que pueden provocar el síndrome de la serotonina. Pruebas complementarias del síndrome serotoninérgico Ninguna prueba individual puede confirmar un diagnóstico del síndrome serotoninérgico. Para asegurarse de que los síntomas son a causa del síndrome de la serotonina y no debido a otro problema, el médico puede usar las pruebas para hacer lo siguiente: medir los niveles de los medicamentos que toma el paciente, controlar los signos de infección y, verificar las funciones del organismo que pueden estar afectadas por el síndrome de la serotonina. El médico puede ordenar que se realicen algunas pruebas para descartar otras causas y excluir otros trastornos, como son: análisis de sangre y de orina, radiografía de tórax, tomografía computarizada o punción lumbar. Factores desencadenantes del síndrome serotoninérgico El factor desencadenante principal es un sobreconsumo de medicamentos o una alteración en la dosis diaria de un medicamento. Factores de riesgo del síndrome serotoninérgico Los factores que aumentan el riesgo de padecer este síntoma incluyen: El uso terapéutico de fármacos . Ingerir recientemente un medicamento que se sabe que eleva los niveles de serotonina o haber aumentado la dosis (autoenvenenamiento). Cuando se utiliza más de un medicamento que eleva los niveles de serotonina. Tomar los suplementos de hierbas. Usar una droga ilegal que se sabe que eleva los niveles de serotonina. Complicaciones del síndrome serotoninérgico El síndrome serotoninérgico leve, por lo general, no causa ningún problema una vez que los niveles de serotonina regresan a la normalidad. Si se deja sin tratar, el síndrome serotoninérgico grave puede ocasionar: Acidosis metabólica Rabdomiólisis Convulsiones Lesión aguda en el riñón Espasmos musculares Pérdida de consciencia Muerte Prevención del síndrome serotoninérgico Para prevenir este trastorno es necesario: No alterar las dosis de medicamentos No tomar medicamentos sin prescripción médica Evitar el consumo de sustancias ilegales Preguntas frecuentes: ¿Qué es la serotonina? La serotonina es un neurotransmisor que produce el cuerpo y que es necesario para el buen funcionamiento del organismo por diversas razones ya que se encarga de regular ciertos procesos fisiológicos. En el sistema nervioso central, la serotonina es un neurotransmisor con muchos efectos: modificación de humor, sueño, vómito y dolor. ¿Qué pasa con el exceso de serotonina? El exceso de serotonina provoca el síndrome serotoninérgico, explicado a lo largo de este artículo. ¿Qué es un recaptador de la serotonina? Un recaptador de la serotonina o inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina son los antidepresivos recetados con mayor frecuencia. Pueden aliviar los síntomas de la depresión de moderada a grave, son relativamente seguros y suelen causar menos efectos secundarios que otros tipos de antidepresivos. ¿Qué es la serotonina baja? Tener la serotonina baja puede ocasionar cambios importantes en la salud mental de la persona: ansiedad, depresión, problemas para dormir, apatía, falta de energía, entre muchos otros síntomas. ¿Qué es el síndrome neuroléptico? El síndrome neuroléptico se caracteriza por el estado mental alterado , la rigidez muscular, la hipertermia y la hiperactividad autonómica que se produce cuando se usan ciertos fármacos neurolépticos.
Anorexia Nerviosa
Enfermedad

Anorexia Nerviosa

¿Qué es la anorexia nerviosa? La anorexia nerviosa o, anorexia, como se la denomina comúnmente, es un trastorno de desorden alimentario cuya principal característica recae en tener un peso extremadamente bajo (por debajo de lo que se considera saludable), a consecuencia de la propia restricción alimentaria del individuo por miedo a engordar. La persona anoréxica tiene una percepción distorsionada de su peso y su cuerpo, lo que la lleva a evitar el aumento de peso, ingiriendo menos cantidad de comida, provocando el vómito después de comer, o tomando laxantes o diuréticos. La anorexia es una enfermedad común grave que, aunque puede presentarse a cualquier edad, es más frecuente en mujeres adolescentes de clase social media y media-alta, también es común en bailarinas, gimnastas y modelos. Tipos de anorexia Existen dos tipos distintos de anorexia: Tipo restrictivo : es una anorexia o bajada drástica de peso ocasionada por la restricción de comidas y la realización intensa de ejercicio. Tipo bulímico : también denominado purgativo o compulsivo. La reducción de peso se consigue provocando vómitos o ingiriendo laxantes después de darse atracones de comida. Causas de la anorexia nerviosa La anorexia nerviosa puede desencadenarse por la combinación de diferentes factores genéticos, psicológicos y socioculturales como: Depresión. Ansiedad. Obesidad. Pérdidas afectivas. Trastorno obsesivo compulsivo. Insatisfacción personal o corporal. Sucesos traumáticos. Sentimiento de perfeccionismo. Antecedentes familiares. Cultura del país con respecto a los patrones de belleza. Presión por parte de grupos sociales. Síntomas de la anorexia nerviosa Los síntomas de la anorexia a menudo pueden pasar desapercibidos durante bastante tiempo porque el propio enfermo los trate de ocultar. Algunos síntomas físicos presentados son: delgadez extrema, cansancio, mareos, desmayos, ausencia de menstruación, piel seca, dolor de abdomen , presión arterial baja, deshidratación, sensación de frío constante, callosidades en los nudillos por la provocación de los vómitos, anemia, estreñimiento, caída del cabello, problemas dentales y arritmias, entre otros. En cuanto a los síntomas emocionales y de conducta, puede presentarse un régimen estricto o saltarse las comidas poniendo excusas, preocupación por los alimentos, sobre todo los de alta carga calórica, mentir acerca de la comida, acudir al baño siempre inmediatamente después de comer para provocar los vómitos, miedo a engordar, quejarse del aspecto y peso, distorsión de la imagen corporal , irritabilidad, tristeza , falta de apetito sexual, vestirse con muchas capas de ropa, mirarse continuamente al espejo, aislamiento social, baja autoestima…etc. Tratamiento de la anorexia nerviosa El tratamiento más urgente de la anorexia nerviosa es la r ealimentación para intentar alcanzar cuanto antes un aumento del peso (es posible que se necesite una sonda nasogástrica para recibir los alimentos). Educación nutricional para volver a coger buenos hábitos alimenticios y tratar de recuperar la normalidad biológica en los indicadores sanguíneos y regreso de la menstruación. Posteriormente, se tratan de resolver los problemas psicológicos con un psicoterapeuta o grupo de apoyo. Es un proceso largo, ya que primero hay que hacer entender al paciente que tiene una enfermedad y luego proceder a mejorar su autoestima y el resto de problemas psíquicos que se presenten. Si la desnutrición o los desórdenes psíquicos son graves, se debe hospitalizar al paciente para controlar los signos vitales, la deshidratación y otras afecciones, aunque el tratamiento continúe después en el domicilio. También pueden prescribirse algunos medicamentos antidepresivos como parte de ayuda complementaria al tratamiento. Pruebas complementarias de la anorexia nerviosa Algunas pruebas son determinantes para el diagnóstico y ayudan a determinar si existen otras complicaciones derivadas de la anorexia: Análisis de sangre con hemograma completo: para hacer un recuento de la células sanguíneas, medir la cantidad de albúmina y electrolitos, y comprobar la función hepática, renal y tiroidea. Análisis de orina. Evaluación psicológica. Radiografías o pruebas de densidad ósea. Electrocardiografía. Factores desencadenantes de la anorexia nerviosa Algunos de los factores que pueden desencadenar la anorexia nerviosa son el exaltamiento de la delgadez en la mujer que promueve l a cultura occidental y la presión de determinados grupos sociales , algunos actos, como ponerse a dieta, cambiar de casa o de instituto, terminar una relación sentimental, la muerte de un familiar y el estrés emocional. Factores de riesgo de la anorexia nerviosa Las niñas y mujeres adolescentes son más propensas a sufrir esta enfermedad. El paciente que haya tenido un pariente que ha sufrido anorexia en alguna ocasión, corre más riesgo de padecerla por los cambios en los genes específicos y, si ya se ha padecido anorexia previamente o no se reconoce el problema, también es más fácil sufrir recaídas. Complicaciones de la anorexia nerviosa La anorexia puede tener muchas complicaciones, algunas de ellas especialmente graves: No reconocer la enfermedad y convertirla en un estilo de vida. Disminución de glóbulos blancos y aparición de infecciones. Pérdida del conocimiento. Arritmias. Convulsiones. Deshidratación. Debilitamiento de los huesos. Caries dental. Fallecimiento. Prevención de la anorexia nerviosa Algunas recomendaciones útiles para prevenir la anorexia son: Tener buenos hábitos alimentarios: comer siguiendo unos horarios preestablecidos, hacerlo sentado…etc. No aislarse socialmente. Mantener la comunicación con la familia. Evitar mirarse al espejo con frecuencia. Eludir la báscula y pesarse constantemente. Acudir a psicoterapia individual, familiar o con grupos de apoyo. Especialidades a las que pertenece la anorexia nerviosa El diagnóstico y tratamiento de la anorexia nerviosa es multidisciplinar, normalmente es realizado de forma coordinada por la los especialistas en medicina familiar, medicina interna, psiquiatría, psicología, endocrinología y ginecología. Preguntas frecuentes: ¿Cuáles son los tipos de anorexia? En los tipos de anorexia nerviosa se puede diferenciar un subtipo restrictivo , en el cual el enfermo disminuye de peso mediante dietas, una restricción alimentaria y la realización de ejercicio físico intenso o, un subtipo bulímico , compulsivo o purgativo, en el que el enfermo recurre a atracones de comida para después desprenderse de lo comido provocándose vómitos o tomándose laxantes. ¿Qué tipo de enfermedad es la anorexia? La anorexia es un trastorno de la conducta alimentaria, habitualmente con origen neurótico o psiquiátrico. ¿Cuáles son las principales causas de la anorexia? Las principales causas de la anorexia tienen un origen psicológico (trastornos obsesivos, depresión, insatisfacción personal…), s ociocultural (patrones de belleza establecidos en países occidentales y presión de grupos sociales a los que pertenece el individuo) y/o genético (antecedentes en familiares de primer grado). ¿Qué es la anorexia nerviosa purgativa? La anorexia nerviosa purgativa consiste en darse atracones de comida para posteriormente purgarse o eliminar los alimentos ingeridos mediante la toma de diuréticos, laxantes o la provocación auto inducida de vómitos. ¿Qué es la bulimia? La bulimia es un trastorno de la conducta alimentaria consistente en la toma recurrente y descontrolada de grandes cantidades de comida (atracones), que después provocan en el enfermo un fuerte sentimiento de vergüenza o culpabilidad , derivando en la auto provocación de vómitos o la toma de laxantes para tratar de eliminar los alimentos y calorías ingeridos.