Los quistes de ovarios o quistes funcionales, son quistes que se producen cuando un ovocito sale hacia las trompas de Falopio, quedando una zona dentro del ovario que se llena de líquido. Los quistes de ovarios se pueden ver en hasta un 10% de las mujeres en edad fértil, aunque la mayoría van a desaparecer entre 8 y 12 semanas después de su diagnóstico. Puede dar lugar a una hemorragia o bien a una torsión ovárica por su tamaño, en estos casos se trata de una urgencia médica, en general, se puede considerar una enfermedad leve.
Los quistes foliculares se producen cuando el folículo no es capaz de abrirse, quedando el óvulo en su interior y dando lugar a la presencia de líquido.
Los quistes endometriales se producen por la llamada endometriosis, enfermedad que precisa tratamiento adecuado para su control.
El quiste de ovario en la mayoría de las ocasiones suele ser asintomático, siendo un hallazgo ecográfico en el contexto de un estudio ginecológico. Cuando produce síntomas estos pueden ser dolor, el cual puede estar relacionado con las relaciones sexuales y con la defecación. También puede ser permanente en la zona pélvica y puede producir hinchazón abdominal.
En general los quistes de ovario no precisan tratamiento, ya que suelen resolverse por sí mismos en unas 8 a 12 semanas.
En las pacientes en las que los quistes de ovario se presentan de forma repetida, puede ser necesario prescribir un tratamiento con píldoras anticonceptivas. Estas píldoras no retiran el quiste presente, pero puede evitar que se produzcan otros nuevos.
Cuando la paciente presenta un quiste que no se reduce o que aumenta de tamaño puede ser necesario realizar una cirugía para retirar dicho quiste.
Los factores desencadenantes de los quistes de ovario son las hormonas, tanto los estrógenos como los progestágenos.
El único factor de riesgo para los quistes de ovario es la edad fértil de la mujer, siendo más frecuentes en la adolescencia y en la perimenopausia, momentos de mayor descontrol hormonal.
No hay modo de prevenir los quistes de ovario.
Los quistes de ovario son diagnosticados y seguidos en su evolución por parte del ginecólogo.
Los quistes de ovario son entidades en principio benignas que suelen resolverse por sí mismas, en la mayoría de los casos son hallazgos ecográficos, que el ginecólogo controlará pasados unos meses y cuyo resultado suele ser la resolución espontánea de los mismos.
El ovario poliquístico es un enfermedad en la cual los ovarios se llenan de múltiples quistes que están produciendo hormonas. Esto se traduce en alteraciones hormonales que pueden dar lugar a presencia de vello en mayor abundancia, obesidad, y presencia de acné importante. También puede dar lugar a infertilidad y a ciclos menstruales ausentes o irregulares.
En principio un quiste es una bolsa con material líquido en su interior, un tumor suele ser una masa sólida, sin embargo, algunos tumores pueden tener un aspecto quístico.
Un quiste hemorrágico es el quiste que presenta sangre en su interior, o bien el quiste que al romperse produce una hemorragia. Es típico del proceso de evolución de los quistes grandes funcionales, puede producir dolor y un mínima hemorragia vaginal al producirse.
La dismenorrea es la palabra técnica con la que se conoce el dolor que se produce durante la menstruación. Este dolor suele producirse por las pequeñas contracciones que produce el útero, para lograr el desprendimiento del endometrio y su evacuación hacia el exterior a través del cuello del útero.