Naiara tiene 32 años, es madre lactante de un bebé de 9 meses y acude a la consulta porque desde hace un mes tiene mucho dolor en el cuello, la espalda y el brazo derecho. También tiene sensación de adormecimiento en la mano y los dedos. Acaba de mudarse de ciudad y lleva un mes en la nueva casa.
En la etapa del embarazo el cuerpo de la mujer sufre una serie de cambios físicos, fisiológicos y mecánicos. A nivel hormonal se segrega una sustancia llamada Relaxina, esta hormona es la responsable de dar mayor elasticidad al sistema musculo esquelético y al útero con el fin de facilitar el proceso del parto.
Durante el periodo de lactancia y meses después, la relaxina sigue estando presente en el cuerpo de la madre, sus tejidos son más elásticos, las articulaciones son menos “estables” y el riesgo de lesión ante una carga pesada o una mala postura es mayor.
La postura de Naiara cuando tiene que dar el pecho a su niña es muy dañina para su espalda. Se sienta en el borde de la silla con el cuello y la espalda encorvados y el brazo que sujeta la cabeza de la pequeña no tiene ningún tipo de apoyo.
Mantener esta postura varias veces al día teniendo en cuenta que la niña aumenta de peso progresivamente, le ha ocasionado un desequilibrio muscular a nivel del cuello y de la espalda además de activar algunos puntos de tensión en la zona de la escapula, dando lugar al dolor del brazo y la sensación de adormecimiento en la mano y los dedos.
Nuestro objetivo en la primera sesión será:
CORREGIR LA POSTURA
Antes de empezar con el tratamiento manual, enseñamos a Naiara la postura correcta para dar el pecho a su niña. Así, eliminamos el origen del dolor y evitamos que en un futuro vuelva a tener síntomas en la espalda.
Explicamos a Naiara la posición correcta:
Una vez en camilla el tratamiento tendrá como objetivo:
Imágenes tomadas del libro Travell & Simons Myofascial Pain & Dysfunction: the trigger point manual. 2002
RECOMENDAR EJERCICIO FÍSICO
Después del tratamiento manual, recomendamos a Naiara realizar ejercicio físico mínimo dos veces por semana.
Sabemos la cantidad de beneficios que tiene realizar cualquier actividad física, en el caso de Naiara, practicar ejercicio físico permite movilizar, estirar y trabajar todas las zonas del cuerpo, corregir la postura y aumentar la resistencia de sus tejidos para coger a su niña sin riesgo de lesión.
Artículo escrito por Patricia de Maya. (Fisioterapeuta)