La diversidad generacional ha dejado de ser solo un ideal para convertirse en una auténtica ventaja competitiva. Uno de los grupos que a menudo se pasan por alto es el de los trabajadores senior (más de 55 años). Estos empleados -que representan el 33,83% de la población española- aportan una experiencia inigualable, habilidades consolidadas y una perspectiva única. No es de extrañar que las empresas actualizadas y competitivas sean las que saben reconocer y valorar la diversidad generacional. Descubre en este post cómo gestionar la diversidad generacional de manera efectiva para obtener mejores resultados.
No hay que pensar en la edad, sino en talento, y la experiencia es un recurso invaluable. Los trabajadores senior han visto la evolución de las tendencias del mercado, han enfrentado múltiples desafíos y han adquirido diferentes habilidades a lo largo del tiempo. Reconocer este bagaje de conocimientos y experiencia es una estrategia inteligente. Además, su creciente digitalización añade un valor extra, demostrando su capacidad de evolución.
La diversidad generacional en el lugar de trabajo no debe ser un desafío, sino una oportunidad para favorecer la innovación y creatividad. Al promover el trabajo en equipo entre empleados de diferentes edades, las empresas pueden combinar lo mejor de ambos mundos: la energía y adaptabilidad de los más jóvenes con la sabiduría y experiencia de los más veteranos. Las mentorías (ascendentes o descendentes), talleres o programas de intercambio pueden ser un gran aliado.
Según el III Barómetro del Consumidor Sénior 2022, más del 70% de la población senior en España está conectada a internet, pero no todos tienen las mismas necesidades de formación. Las organizaciones deben promover programas de formación flexibles y adaptados a cada generación, asegurando oportunidades de aprendizaje y desarrollo sin barreras ni discriminación.
Las empresas pueden -y deben- ofrecer a sus trabajadores paquetes de beneficios adaptados -como pueden ser programas de bienestar, telemedicina, etc.-, así como flexibilidad en el trabajo. La mejor estrategia laboral es la que tiene en cuenta las necesidades de las personas en cada momento de su vida, no de su edad.
Lamentablemente, aún persisten estereotipos y prejuicios relacionados con la edad. Las compañías que desean aprovechar al máximo la diversidad generacional deben promover un ambiente en el que todos, sin importar la edad, se sientan valorados y respetados. Esto puede conseguirse a través de la formación en diversidad e inclusión, la comunicación abierta y respetuosa (evitando expresiones como “equipo joven y dinámico” o “muy experimentado”), etc.
Como hemos visto, la población senior en España es un segmento demográfico que no puede ser ignorado por las empresas. La experiencia, el poder adquisitivo y su creciente adaptabilidad al mundo digital los convierten en un recurso invaluable. En Savia Empresas, reconocemos este potencial y los beneficios de trabajar en equipo hacia un objetivo común. ¿Estás listo para aprovechar al máximo la diversidad generacional en tu empresa?