El tratamiento consiste en la aplicación de microinyecciones de bótox provocando la relajación de los músculos de la mandíbula. De este modo, se obtiene un bienestar mandibular de entre seis y doce meses. El bótox es una proteína natural y segura especialmente indicada para el tratamiento del bruxismo, además de otros tratamientos de medicina estética. Tratamiento bruxismo con infiltración de bótox en Madrid desde 575€ con los mejores especialistas en Medicina Estética y Unidad Laser