Test preeclampsia segundo o tercer trimestre en cualquier ciudad

La preeclampsia es una de las alteraciones que aparecen durante el embarazo que ha de ser diagnosticada cuanto antes. Aparece tras las primeras 20 semanas de gestación y provoca hipertensión, daño renal y hepático. Es habitual en mujeres cuya tensión arterial no había presentado alteración alguna con anterioridad.

De no tratarse, puede provocar la muerte de la madre y del bebé. Lo habitual es que se adelante el parto para evitar las peores consecuencias. El test de diagnóstico es esencial para establecer el alcance exacto de la dolencia y el tratamiento más adecuado para solucionarla de la mejor forma posible.

¿Qué es el test de preeclampsia?

Una prueba que detecta el nivel de los marcadores angiogénicos PIGF (Placental Growing Factor, factor de crecimiento de la placenta) y sFlt1 (Tirosina quinasa 1 soluble tipo fms). La mujer que padece preeclampsia tiene un bajo nivel de PIGF y uno más alto de sFlt1.

Llevar a cabo el test permite al especialista adelantarse unas cinco semanas a la aparición de los síntomas. La prueba tiene una eficacia del 95 %. Las alteraciones en los niveles comentados también indican la probabilidad de parto prematuro.

¿A quién va dirigido?

A cualquier mujer embarazada que tenga factores de riesgo por su historial clínico. La alteración puede aparecer antes o después de la trigésimo cuarta semana de gestación. En el primer caso, aumenta el riesgo de anomalías en la placenta. En el segundo, lo habitual es que el riesgo sea menor para la gestante y el feto.

¿Cuáles son los síntomas de la preeclampsia?

Son diversos y de experimentarlos es imprescindible realizarse el test para confirmar o descartar la enfermedad. Se comentan en el siguiente listado:

• Proteinuria. Supone un aumento de las proteínas en la orina. Se acompaña de alteraciones del funcionamiento renal.
• Cefaleas intensas.
• Vómitos.
• Molestias en la parte superior del abdomen, especialmente en el lado derecho del cuerpo.
• Trombocitopenia (bajada del nivel de plaquetas).
• Alteraciones hepáticas.
• Líquido en los pulmones y problemas respiratorios.
• Menor cantidad de orina.

La presencia de los síntomas anteriores puede confundirse con los habituales del embarazo. Si la mujer es primeriza, se recomienda que se someta al test para conocer si padece o no la dolencia. Lo más adecuado es dialogar con el especialista para determinar el alcance de los síntomas y comenzar, si fuera necesario, el tratamiento.

¿Cómo se lleva a cabo el test de preeclampsia?

Mediante un análisis de sangre. La toma de la muestra es la habitual. Es en el laboratorio donde se procede a confirmar los niveles de los marcadores ya comentados. Los resultados suelen tardar menos de una semana y se envían directamente al especialista para que pueda informar a la paciente.

¿Para qué sirve?

Principalmente para conocer el riesgo real de la enfermedad. El ginecólogo tiene diversas opciones de tratamiento dependiendo de cuándo aparezca la alteración:

• Si lo hace en el segundo trimestre del embarazo es posible aplicar medidas de protección para frenar su desarrollo.
• Si lo hace a partir del tercer trimestre del embarazo es necesario realizar un seguimiento más intenso.

Además, la prueba ayuda a determinar la presencia de otras consecuencias asociadas. Una de ellas es el síndrome de HELLP. Sus siglas hacen referencia a hemólisis, un nivel elevado de las transaminasas y una bajada en el nivel de las plaquetas. En este caso, no siempre aparecen síntomas como la proteinuria o la hipertensión.

La valoración médica es indispensable en todo momento ya que de ella depende que las consecuencias de la preeclampsia no sean letales.

¿Cuáles son las ventajas del test de preeclampsia?

Preeclampsia y embarazo es un binomio poco recomendable. Su diagnóstico precoz es imprescindible. La prueba permite:

• Distinguir entre la preeclampsia y otras dolencias que comparten los mismos síntomas.
• Identificar cuáles son los casos específicos que podrían beneficiarse de un tratamiento profiláctico.
• Seleccionar a algunas mujeres para posibles tratamientos curativos de la enfermedad.

Al ser indoloro y ofrecer tantas garantías, se aconseja que todas las embarazadas se sometan a la prueba. Cuanto antes se realice, más opciones hay de poner en marcha un tratamiento.

En lo que respecta al feto, su crecimiento se complica si la placenta tiene alguna malformación o se desprende. La vida del bebé está en juego y la posibilidad de sufrir un parto prematuro aumenta como consecuencia de la preeclampsia precoz.

De realizarse en el primer trimestre, el test ayuda a evaluar los riesgos y a determinar cuáles son las necesidades específicas de cada mujer. Dependiendo del resultado, es posible fijar una agenda de visitas, revisiones y controles para cada mujer. La mujer tendrá una información más completa y las claves para conocer los síntomas que va a experimentar.

Se considera, por lo tanto, esencial incluir este test en el resto de procedimientos y cribados destinados a comprobar la salud de la mujer y del bebé.

¿Cuál es el tratamiento de la preeclampsia?

Tras el diagnóstico, se aconseja tomar aspirinas si se ha detectado durante las primeras 16 semanas de gestación. Esta alternativa es segura para la madre y el bebé al conseguir controlar la aparición de la preeclampsia precoz (la más grave). La ingesta de aspirina evita:

• Un 62 % de los casos si se toma durante las primeras 37 semanas.
• Un 80 % de la preeclampsia que se diagnostica antes de las 34 semanas.

El riesgo de fallecimiento se reduce de un 10 % a un 5 %, por lo que la eficacia del tratamiento es indudable.

¿En qué ciudades se ofrece el test de preeclampsia?

En diversas localidades repartidas por toda la geografía nacional. Se recogen en el siguiente listado:

• Almería.
• Granollers.
• Jaén.
• Terrassa.
• Valencia.
• Murcia.
• Alicante.
• Castellón de la Plana.
• Huelva.
• Tortosa.
• Valencia.
• Málaga.
• Castelldefels.
• Salamanca.
• Granada.
• Vitoria.
• Igualada.
• Oviedo.
• Cartagena.
• Ronda.
• Albacete.
• La Seu d’Urgell.
• Pontevedra.
• Mataró.
• Valladolid.
• Barcelona.
• Lérida.
• Palma de Mallorca.
• Córdoba.
• Sant Cugat del Vallès.
• Cádiz.
• Madrid.
• Sevilla.

¿Cuánto cuesta?

El test de preeclampsia tiene un precio de 155 euros de media. Todo dependerá de la ciudad donde se practique y de los servicios complementarios que ofrezca la clínica correspondiente.