Ortopantomografía en cualquier ciudad

Ortopantomografía

La ortopantomografía se ha convertido en una prueba diagnóstica de enorme utilidad. Su uso es cada vez más habitual, sobre todo por sus excelentes resultados. A continuación, se repasan sus características, ventajas y a quién está dirigida. Se incluye información referente al precio de una ortopantomografía dental y a las ciudades donde es posible solicitar esta alternativa.

Asimismo, se valora qué tipo de pacientes pueden someterse a ella y qué busca el odontólogo al practicarla. Despejar todas las dudas referentes a esta prueba es el primer paso para poder confiar en su idoneidad. Todo sea por analizar el estado de la dentadura del paciente.

¿Qué es una ortopantomografía?

Se entiende por ortopantomografía dental a la radiografía en dos dimensiones de la boca del paciente. Los odontólogos suelen usarla para realizar un primer diagnóstico. El objetivo es analizar el estado real de las piezas dentales y de los tejidos que las sostienen. Además, el nivel de radiación es mínimo, lo que favorece que se lleve a cabo de forma habitual en las clínicas dentales.

¿Cuándo debe solicitarse?

Debe realizarse una radiografía ortopantomografía al menos una vez al año para apreciar los cambios que no pueden observarse a simple vista. Además, ayuda a detectar el inicio de patologías que pueden complicarse con el tiempo y que podrían ser de pronóstico grave.

¿Cómo se lleva a cabo una ortopantomografía?

El proceso es totalmente indoloro para el paciente. Este debe estar de pie y colocar su barbilla en la base del dispositivo, que girará alrededor de su cabeza. El objetivo es conseguir una imagen de 360º para detectar cualquier tipo de incidencia o anomalía. La persona que se someta a la prueba puede seguir con su rutina sin ningún tipo de problema. Es importante recordar que:

• Debe apoyarse la mandíbula en el saliente que incluye el aparato.
• Las manos del paciente sujetan dos soportes para evitar que se mueva.
• La máquina gira poco a poco alrededor de la cabeza, sin causar molestia alguna. Este movimiento progresivo es el que permite que las imágenes sean tan nítidas como útiles a la hora de su revisión.
• El dentista va viendo las imágenes en tiempo real. Puede detenerse en cualquier punto y ampliar lo que estime oportuno.

Lo habitual es que la prueba no dure más de 10 minutos. Solo se le solicitará a la persona que se quite las joyas o los complementos que pudieran distorsionar la imagen.

¿Se puede realizar la prueba a todo tipo de personas?

Como se ha indicado, el nivel de radiación es mínimo, pero es importante tener en cuenta algunos factores:

• Las mujeres embarazadas, o que sospechen que podrían estarlo, deberían indicárselo al dentista cuanto antes. Dependiendo del estado de su salud dental, así habría que intervenir. Lo habitual es que se proteja de forma especial a la paciente, para evitar posibles daños en el feto. No se recomienda su realización a partir de las ocho semanas de embarazo.
• Los niños. Si bien es esencial detectar cómo está siendo el desarrollo de su dentadura, no es menos cierto que hay algunos riesgos. Lo habitual es que sea el dentista el que elija la cantidad de radiación a aplicar, o que acorte la prueba para centrarse en algunos puntos concretos de la dentadura.

Antes de someterse a la radiografía, se aconseja comentar cualquier tipo de problema médico que pueda influir en el resultado final.

¿En qué ciudades se ofrece la ortopantomografía?

Esta alternativa se ofrece en distintas ciudades. Dependiendo de la elegida, el precio de la ortopantomografía puede variar un poco. Las siguientes localidades disponen de este servicio:

• Sevilla.
• Málaga.
• Móstoles.
• Boadilla del Monte.
• Majadahonda.
• Murcia.
• Madrid.
• Torrelodones.
• Salamanca.
• Alcalá de Henares.
• Segovia.
• Cuenca.
• Elche.
• Alicante.
• Zamora.
• Valladolid.
• Valencia.
• Zaragoza.
• A Coruña.
• Bilbao.
• Huesca.
• Barcelona.
• Sant Cugat del Vallès.

¿Cuáles son las ventajas de una ortopantomografía?

Las ventajas son diversas, y ayudan al odontólogo a prevenir la aparición de dolencias o a corregir las ya existentes. Las principales se pueden resumir en el siguiente listado:

• Detección de caries. Aparecen en la radiografía como imágenes más oscuras, dada la ausencia del tejido duro. Suele presentarse como un agujero en el diente.
• La extensión de las caries. En ocasiones, afectan al nervio dental provocando molestias como la sensibilidad o el dolor.
• La presencia de infecciones. Pueden alcanzar a los huesos adyacentes y presentar granos de pus en las piezas anexas. También se analizan sus causas y cuáles son las opciones de tratamiento más eficaces.
• Localización de dientes en la mandíbula que no han llegado a erupcionar. Adoptan tonos blancos o grises en la prueba.
• Conocer la cronología del crecimiento dental en los niños. También aparecen los tonos grises y blancos en la mandíbula. La prueba ayuda a saber si los dientes están creciendo de forma correcta.
• Ubicar las resorciones radiculares provocadas por infecciones o por traumatismos. La raíz del diente es más corta y se puede dar la movilidad dental.
• La adaptabilidad de la densidad ósea de la mandíbula a la colocación de implantes dentales. Las infecciones y las extracciones dentales suelen dejar menos hueso del recomendable.
• Las lesiones óseas provocadas por una patología. Razón por la que el historial médico del paciente es tan importante para determinar el alcance de la lesión.
• El estado de la articulación temporomandibular, los maxilares, el tabique nasal y las posibles asimetrías del hueso.
• La patología periodontal. Tras confirmar la periodontitis o la gingivitis, se analiza si la infección ha alcanzado el nivel subgingival. De existir bolsas periodontales o abscesos, es posible determinar su tamaño y profundidad.

Como prueba diagnóstica, es aconsejable para poder tener una visión completa y precisa de la boca del paciente. Se lleva a cabo en la primera visita para determinar la estrategia que se necesita poner en práctica.

¿Cuánto cuesta?

El precio de una ortopantomografía es similar en toda España. Oscila entre los 18 y los 25 euros. Se suele incluir en la primera consulta al ser una eficaz guía para que el odontólogo sepa por dónde debe empezar su intervención, o cuál es el tratamiento más recomendable.