Se trata de una cirugía que mejora el tamaño, la forma y la textura de los senos mediante la implantación de una prótesis mamaria. También puede servir para reducir el tamaño de los senos o corregir asimetrías. Las incisiones cutáneas se llevan a cabo con suturas intradérmicas (por dentro de la piel para reducir su visibilidad). Se lleva a cabo con anestesia general y requiere de dos días de ingreso hospitalario.