Colangiografía percutánea en cualquier ciudad

Colangiografía percutánea

¿Qué es una colangiografía percutánea?

La colangiografía percutánea es un procedimiento diagnóstico mínimamente invasivo para evaluar y tratar la obstrucción en el tracto biliar.

La colangiografía percutánea o CTPH es un examen a través de rayos X de las vías biliares. Se realiza inyectando directamente un contraste en la vía biliar a través del abdomen para producir una imagen del tracto biliar utilizando rayos X continuos (fluoroscopia). También se puede utilizar una ecografía o introducir un catéter si se quiere realizar el drenaje de la bilis.

¿Cuándo se utiliza la prueba?

La colangiografía percutánea generalmente se realiza cuando los procedimientos de diagnóstico no invasivos, como la colangiografía por resonancia magnética (CPRM) y la colangiografía retrógrada endoscópica (CPRE ), no son factibles.

El objetivo de la colangiografía percutánea es averiguar la causa y la ubicación concreta de la obstrucción biliar. El procedimiento suele ser un paso preliminar al tratamiento de las enfermedades biliares.

El tracto biliar, también conocido como sistema biliar está formado por el hígado, la vesícula biliar y una red de conductos de drenaje. El tracto biliar produce, almacena y libera bilis en la parte inicial del intestino (duodeno). El líquido biliar ayuda en la digestión de grasas y vitaminas liposolubles. La bilis también transporta los desechos procesados ​​por el hígado al duodeno para ser excretados.

El hígado produce bilis, el 50% de la cual se almacena en la vesícula biliar. Los conductos hepáticos del hígado y el conducto cístico de la vesícula biliar se unen para formar el conducto biliar común que transporta la bilis al duodeno. Si el flujo de bilis se obstruye en cualquier parte del sistema biliar se produce ictericia y otras patologías.

Entre las causas más frecuentes de la obstrucción del conducto biliar se incluyen:

• Cálculos del conducto biliar (coledocolitiasis)
• Cálculos biliares (colelitiasis)
• Estenosis del conducto biliar
• Inflamación de los conductos biliares (colangitis esclerosante primaria)
• Inflamación del páncreas (pancreatitis)
• Infecciones sistémicas
• Tumores benignos
• Crecimiento anormal de tejido
• Cáncer de páncreas, del conducto biliar, de hígado o de la vesícula biliar

¿Cómo se realiza la prueba?

La colangiografía percutánea generalmente la realiza un radiólogo en el laboratorio de radiología. El procedimiento puede durar hasta una hora. Por lo general, la prueba se realiza con anestesia local, ya que en ocasiones puede ser prolongada y dolorosa. Para realizar la colangiografía percutánea se coloca una cánula intravenosa que permite el acceso vascular durante todo el proceso. Antes de realizar la prueba pueden administrarse al paciente antibióticos de amplio espectro por vía intravenosa.

Se utiliza una aguja para inyectar el tinte de contraste en los conductos biliares y a continuación se obtienen diversas imágenes de la zona biliar que permiten valorar la patología obstructiva del paciente.

Una vez realizada la prueba, el paciente puede irse a su casa. En el caso de que experimente alguna molestia se le pueden administrar analgésicos. El tratamiento dependerá del diagnóstico obtenido a través de las películas fluoroscópicas.

¿Cuándo debo realizarme esta prueba?

Esta técnica se emplea cuando otros métodos menos invasivos no son satisfactorios. Se usa principalmente para detectar anomalías de la vía biliar, tumores, dilataciones, estrechamiento, cálculos y cualquier otra patología que afecte a esta zona.

Precio medio de la prueba

Savia dispone de centros médicos en las principales ciudades de España, en los que se realiza la prueba de colangiografía percutánea. El importe medio de la prueba depende de cada centro médico concreto y oscila desde los 96,50 € hasta los 131, 99 €.