Tratamiento capilar no invasivo (incluye 4 sesiones de plasma rico en proteínas (PRP) + láser capilar de baja intensidad)

El plasma rico en plaqueta o PRP se obtiene a partir de la extracción de sangre venosa del paciente (es decir, como la que se obtiene cuando se hace un análisis de sangre). La muestra obtenida se centrifuga para así separar la fracción de plasma donde se encuentran las plaquetas, que contienen en su interior los factores de crecimiento. A través de microinyecciones, el PRP se inyecta en el cuero cabelludo del paciente para activar su regeneración.

En los casos de alopecia, se consigue reducir la pérdida de cabello y mejorar su calidad, ya que se estimula la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico para aumentar la vascularización del folículo piloso.
En el caso de los trasplantes de pelo, se usa para mejorar la cicatrización de la zona donante, así como para estimular la regeneración de los tejidos en la zona receptora y aumentar la supervivencia de los injertos.

El tratamiento con láser capilar de baja intensidad se usa luz amplificada de baja intensidad sobre el cuero cabelludo (previamente mojado) para estimular las células de la raíz de los folículos pilosos que están en fase de reposo y mejorar la circulación sanguínea. El objetivo es mejorar la vasodilatación capilar y mejorar el crecimiento del cabello.
Debe aplicarse en diferentes sesiones (normalmente 2 sesiones a la semana) durante al menos 6 meses. El tiempo de exposición será cada vez mayor en cada sesión, aunque nunca sobrepasará los 20 minutos.
En algunas ocasiones, previamente a la aplicación del láser capilar de baja intensidad, se complementará con tratamientos tópicos para potenciar su efecto y absorción.

Los factores de crecimiento plaquetario ayudan a revitalizar el cabello y son eficaces en los trasplantes de pelo, tanto de hombres como de mujeres, donde consiguen disminuir el periodo de cicatrización, tanto en la zona donante como en la receptora, además de acortar el periodo en que crece el pelo trasplantado y que éste logre, en menos tiempo, mayor grosor y longitud.
Los resultados son visibles progresivamente, aunque siempre dependerá de las características de cada paciente. Comienzan a ser visibles entre los 3 y 6 meses posteriores, aunque siempre dependerá de las características de cada paciente.

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