Los Ultrasonidos Focalizados de Alta Intensidad (HIFU, por sus siglas en inglés) determinan un tipo de tratamiento muy útil frente a la flacidez del rostro. Estos son capaces de atravesar las estructuras profundas de la piel, llegando hasta el músculo, estimulando la producción de colágeno. Además, su temperatura puede alcanzar los 70 °C.
Se trata de un tratamiento no invasivo ni doloroso que dota a la piel de elasticidad y firmeza.