Un trasplante de cabello se realiza para tratar casos de calvicie y alopecia, habitualmente de origen hereditario. La calvicie es una de las principales preocupaciones estéticas de los varones.
La técnica FUE es una de las técnicas más avanzadas y de las más utilizadas en España.
Generalmente, un trasplante capilar se lleva a cabo a partir de los 25 años, antes puedes no ser aconsejado ya que la caída del pelo aún no se ha detenido. En estos casos es preferible utilizar algún método más conservador.
La técnica FUE es un procedimiento de microinjerto capilar que consiste en extraer, con un microbisturí y bajo anestesia local, los folículos de la zona donante (parte posterior y lateral de la cabeza), uno a uno, para introducirlos en zonas receptoras alopécicas. Se realiza mediante microincisiones que no dejan cicatrices visibles.
El trasplante de pelo puede realizarse, por ejemplo, de la cabeza a las cejas, a la barba, etc.
Puede realizarse este tratamiento cualquier persona que sufra caída de cabello limitada y controlada, es decir, alopecia leve, o, también, quien desee disimular cicatrices de otros trasplantes anteriores. Esta técnica está especialmente indicada para personas que tengan zonas a repoblar pequeñas y con una buena densidad capilar en la zona donante.
La técnica FUE de implante capilar se realiza, principalmente, porque se obtienen muy buenos resultados con una recuperación corta y sin dejar cicatrices apreciables.
Los riesgos de un injerto capilar son mínimos, estos pueden ser:
No se presentan riesgos de rechazo debido a que el pelo trasplantado es del propio paciente.
Antes de la intervención, se realiza un estudio completo del caso. Conviene examinar el grosor del pelo (cuanto más fino, más complejo es), su tipología (es más difícil si es rizado), si está próximo a tejidos con cicatrices, etc. Tras ello, se planifica la intervención; se prevé la cantidad de folículos a trasplantar, el número de sesiones, se diseña un mapa con la distribución, etc. Y, se realizan diferentes fotografías de la cabeza para poder comparar con el resultado final.
Posteriormente, se afeita el cuero cabelludo en el área donante y en la receptora, anestesiando de forma local al paciente, y se procede con la técnica.
Los resultados del trasplante son naturales y definitivos. Si no hay complicaciones, el paciente puede regresar a su domicilio el mismo día del injerto.
La recuperación es rápida, pudiendo aparecer dolor en la zona donante, esta puede ser tratada con analgésicos habituales. Tras 24 h, puede aparecer un edema de la frente por la bajada de la anestesia, cederá en 1 o 2 días.
En las zonas receptoras, los microinjertos se perciben al principio como pequeñas costras enrojecidas que irán desprendiéndose con el paso de los días. A partir del 5º día, el paciente puede reincorporarse a su actividad sociolaboral.
El paciente debe seguir en su casa algunos cuidados como tomar antinflamatorios, seguir unas recomendaciones específicas de lavado del cabello, procurar no rascarse en exceso, hacer reposo relativo durante 24h y evitar el ejercicio físico al menos durante los siguientes 15 días.
Tras 15 días, el paciente puede volver a la completa normalidad.
Las técnicas de injerto capilar más utilizadas son:
La duración de la técnica FUE depende del tamaño de la zona a tratar, generalmente suele durar entre 4 y 8 horas.
Esta intervención la debe realizar un cirujano estético y, debido a la complicación de esta técnica, resulta conveniente que sea realizada por un especialista en injerto capilar con una amplia y reconocida experiencia en la técnica FUE.