El síndrome de Cushing o hipercortisolismo, es la enfermedad que se produce por exceso de cortisol, ya sea por producción excesiva de las glándulas suprarrenales del enfermo, o por efecto yatrógeno, esto quiere decir, como consecuencia secundaria de la administración de fármacos para tratamientos. También hay tumores neuroendocrinos que pueden producir una sustancia similar al cortisol que puede dar lugar a este síndrome. Es un síndrome muy poco frecuente que se producen de entre 35 a 40 casos por cada millón de personas, y se considera una enfermedad grave.
Los tipos de síndrome de Cushing son:
La causa es el trastorno hormonal que produce un aumento de cortisol o la toma de manera mantenida de medicamentos que contienen corticoides por enfermedades de origen inflamatorio.
Son síntomas de síndrome de Cushing: obesidad central, cara de luna llena (cara redondeada), acné, hipertensión arterial, diabetes, dolor de espalda, alteraciones en el ciclo menstrual, hirsutismo, impotencia en los varones, aumento de la sed, aumento de la micción, debilidad muscular, estrías de color vino, hematomas frecuentes, debilidad, irritabilidad, depresión, ansiedad y la alteración de la autoestima.
El tratamiento del síndrome de Cushing debe estar enfocado a reducir el nivel de cortisol.
Cuando el nivel de cortisol esté elevado por una causa yatrogénica, esto es, por ingerir medicamentos, el médico desciende la dosis de manera paulatina. Si esto no es posible, se intentará que el paciente consuma la menor dosis posible y se establecerá una vigilancia estrecha de este.
Si la causa es un tumor en la glándula hipofisaria, el médico indicará tratamiento quirúrgico, radioterapia o quimioterapia, según sea necesario.
Cuando la producción se debe a un tumor suprarrenal, el médico indicará un tratamiento quirúrgico para extraer el tumor. Si el tumor no puede extraerse se tratará de bloquear la acción de la hormona mediante medicamentos.
Las pruebas complementarias para el diagnóstico del síndrome de Cushing consisten en técnicas para medir la cantidad de cortisol:
El principal factor desencadenante es el exceso de cortisol.
El principal factor de riesgo para el síndrome de Cushing es la toma indiscriminada de fármacos corticoides de forma diaria.
No tomar fármacos corticoides sin control médico.
El especialista en el control del síndrome de Cushing será el especialista en endocrinología. En cuanto al tratamiento, este será responsabilidad, tanto del endocrinólogo, como del cirujano general en los casos de tumores en las glándulas suprarrenales que deben ser extirpados, o bien neurocirujanos en el caso de alteraciones en la glándula hipófisis.
El cortisol es una hormona que, producida por la glándula suprarrenal, se encuentra circulando en la sangre. Aumenta en las situaciones de estrés y actúa elevando el nivel de azúcar en la sangre y disminuyendo la inmunidad. Interviene en el metabolismo de grasas, proteínas y carbohidratos, y también actúa manteniendo en niveles adecuados los iones en sangre, así como la cantidad de agua en el organismo.
La insuficiencia renal es la enfermedad en la que las glándulas suprarrenales no funcionan. Esto da lugar a una menor producción de cortisol, que deberá ser suministrado en forma de medicamento al paciente.
La glándula suprarrenal es una glándula endocrina que se encuentra situada encima de los riñones, de ahí su nombre. Su misión principal es la producción de sustancias como el cortisol, la aldosterona, la adrenalina y noradrenalina. También producen, pero en menor cantidad hormonales sexuales, como los estrógenos y la testosterona.
La función de la glándula suprarrenal es la producción de hormonas como el cortisol, la aldosterona, la adrenalina y la noradrenalina, que van a controlar el equilibrio de iones del organismo, mantener los niveles de azúcar, regular la respuesta inflamatoria, permitir que el cuerpo responda ante una situación de lucha o huida, mantener el embarazo, y comenzar la maduración sexual durante la pubertad.
Los mineralocorticoides son las hormonas que se van a producir en la parte exterior o corteza de las glándulas suprarrenales. Su misión en el organismo es mantener el equilibrio hidroelectrolítico actuando a nivel del riñón. La más importante es la aldosterona.