Descarga la aplicación
google play storeapple store


Pie Diabético

Regístrate y recibe un mes de servicios ilimitados gratuitos en Savia
videoconsulta 24 horasVideoconsulta 24 horas
chat médico 24 horasChat médico 24 horas
evaluador de síntomasEvaluador de síntomas
Regístrate ahora gratis

¿Qué es el pie diabético?

El pie diabético es una complicación frecuente de la diabetes, producida por la afectación de los nervios y las arterias de los pies de la persona que la padece, que provoca pérdida de sensibilidad y una mala circulación de la sangre en los mismos. Estas dos circunstancias hacen más probable que se produzcan cortes, erosiones y heridas en los pies que, de no tratarse de forma rápida y adecuada, pueden evolucionar hacia la formación de úlceras, que pueden llegar a necesitar la amputación progresiva del miembro afectado. Dependiendo de la edad, sexo y tipo de población, la incidencia en los países de nuestro entorno de pie diabético oscila entre el 4 y el 10% de los pacientes diabéticos y la de padecer una úlcera en los pies está en torno al 15%, estimándose que, de estos, aproximadamente la tercera parte provocarán la amputación. Por lo tanto es un proceso que si bien en fases iniciales puede parecer leve puede llegar a ser muy grave.
El tratamiento más importante para el pie diabético es la prevención de la formación de úlceras. Cuando estas ya han aparecido, se deben tratar mediante curas locales.

Tipos de pie diabético

Existen diferentes tipos de pie diabético según la causa que lo ha producido:

  • Úlcera neuropática: producida en una zona de presión o deformidad del pie y caracterizada por no tener alteración en la circulación del mismo, pero sí en su sensibilidad.
  • Úlcera neuroisquémica: tiene una causa mixta ya que existe afectación de la circulación sanguínea con una pérdida de sensibilidad previa y que se suele localizar en la zonas lateral de los dedos y el talón.
  • Pie diabético infectado: se produce cuando una úlcera se sobreinfecta por algún germen patógeno y que puede presentarse de tres formas, como celulitis superficial (la más frecuente y leve), como infección necrotizante (provocando abscesos que se extienden por la planta del pie), o como osteomielitis (la infección alcanza al hueso y a la médula ósea)
  • Artropatía neuropática: se inicia en una lesión ósea como luxaciones o fracturas que pasan casi desapercibidas y al cabo de poco tiempo se acompañan de lesión ulceral.

Existen además diferentes sistemas para medir la gravedad de la afectación del pie diabético en función de varios criterios, siendo las más utilizadas la clasificación de Meggitt-Wagner y la clasificación de Gibbons.

Causas del pie diabético

Las causas que provocan el pie diabético es una afectación neuropática que afecta a las terminaciones nerviosas del pie, produciendo pérdida de sensibilidad y una afectación vascular, sobre todo de las arterias del pie, que dificulta la circulación sanguínea. Ambos factores inciden en la producción de diversos tipos de heridas que pueden llegar a ulcerarse.

Síntomas del pie diabético

Los síntomas del pie diabético van a depender de la causa principal que los produce.

Asociado a la neuropatía diabética se pierde la percepción del dolor, se producen deformidades en determinadas zonas del pie por debilitamiento de la musculatura y sequedad de los pies.

Asociado a la enfermedad vascular, se produce dolor al caminar que obliga a pararse y que se conoce como “síndrome del escaparate” o claudicación intermitente, dolor en reposo, cambios en la coloración del pie, edemas (acúmulo de líquidos) y trofismo de la piel (cambios en la configuración de la piel, que se vuelve seca y fina).

Tratamiento para el pie diabético

El tratamiento más importante para el pie diabético es la prevención de la formación de úlceras. Cuando estas ya han aparecido, se deben tratar mediante curas locales que favorezcan la cicatrización de las mismas. Para ello es necesario el desbridamiento cuando existe tejido necrótico (retirada del tejido muerto ennegrecido) ya sea mediante el uso de pomadas que realizan desbridamiento enzimático o de forma manual y la aplicación de hidrogeles y apósitos hidrocoloides que favorezcan el crecimiento del tejido de granulación. Cuando existen signos de infección se deben utilizar o bien pomadas antibióticas en las curas o bien tomar antibióticos por vía oral o endovenosa si se precisa. Si la afectación vascular es importante puede requerir la intervención de un cirujano vascular para una más completa valoración. En caso de presencia de dolor se tratará con analgésicos.

Pruebas complementarias del tratamiento del pie diabético

El diagnóstico del pie diabético se realiza mediante la exploración física del paciente. No obstante, puede ser necesaria la realización de alguna prueba complementaria para hacer más eficaz el tratamiento, como la realización de cultivos del exudado de la úlcera en busca del germen causante de la infección, o la realización de eco-doppler para valorar el estado de la circulación sanguínea en la pierna y radiografías para descartar la osteomielitis. Se completa con análisis de sangre para valorar niveles de azúcar, proteínas y coagulación.

Factores desencadenantes del pie diabético

Los factores desencadenantes del pie diabético son la presencia de heridas que evolucionan a úlceras en pacientes con neuropatía y enfermedad vascular periférica como complicación de la diabetes que padecen.

Factores de riesgo del pie diabético

Son factores de riesgo de padecer pie diabético aquellos pacientes con:

  • Neuropatía periférica.
  • Enfermedad vascular periférica.
  • Retinopatía.
  • Nefropatía.
  • Que presenten deformidades óseas en los pies.
  • Antecedentes de ulceración previa
  • Consumo excesivo de alcohol.
  • Aislamiento social.

Complicaciones del pie diabético

Las complicaciones del pie diabético son:

  • Grandes úlceras que tardan en curar o que se infectan.
  • Celulitis, infecciones de la piel del pie.
  • Osteomielitis, infección de los huesos del pie.
  • Gangrena: tejido muerto al no haber circulación sanguínea.
  • Artropatía de Charcot.
  • Amputación total o parcial del pie.

Prevención del pie diabético

La prevención del pie diabético requiere:

  • Un buen control del nivel de azúcar en sangre.
  • Control periódico de la tensión arterial y de los niveles de colesterol.
  • No fumar ni beber alcohol.
  • Realizar una dieta equilibrada con aporte de proteínas, vitaminas y minerales.
  • Realizar ejercicio físico suave.
  • Utilizar un calzado adecuado y cómodo que se adapte al pie.
  • Cuidado diario de los pies para evitar heridas, ampollas, grietas, rozaduras y erosiones que incluye:
    • Lavado diario con agua templada.
    • Secado sin frotar con toallas suaves.
    • Aplicar crema hidratante sin alcohol.
    • Mantener uñas cortas y limadas usando tijeras de punta roma.
    • Alejar los pies de fuentes de calor.
    • No usar calcetines que presionen o con goma.
    • Evitar andar descalzo.

Especialidades a las que pertenece el pie diabético

Los especialistas que intervienen en el cuidado del pie diabético son, las enfermeras, para la realización de las curas y educación sanitaria, el área de endocrinología para cuidados de la diabetes, y dermatólogos y cirujanos vasculares para úlceras con mala evolución.

Preguntas frecuentes:

¿Qué es una úlcera isquémica?

La úlcera isquémica es la herida que se produce por una insuficiencia de riego sanguíneo que provoca la muerte de las células y se manifiesta por placas negras en la piel.

¿Tiene algo que ver el pie diabético con la diabetes?

El pie diabético es una complicación frecuente de la diabetes originada en la neuropatía y vasculopatía periférica que esta provoca, y que puede originar úlceras graves en los pies.

¿Qué es una úlcera diabética?

La úlcera diabética es la herida que se produce como consecuencia de padecer una diabetes y sus complicaciones en las terminaciones nerviosas y en los vasos sanguíneos. El lugar más frecuente donde se manifiesta es en los pies.

¿Cómo cuidar los pies de los diabéticos?

El cuidado de los pies en los pacientes diabéticos  tiene como objetivo evitar la aparición de heridas que puedan provocar una ulceración. Para ello hay que mantener una serie de cuidados generales y otros específicos de los pies como:

  • Un buen control del nivel de azúcar en sangre.
  • Control periódico de la tensión arterial y de los niveles de colesterol.
  • No fumar ni beber alcohol.
  • Realizar una dieta equilibrada con aporte de proteínas, vitaminas y minerales.
  • Realizar ejercicio físico suave.
  • Utilizar un calzado adecuado y cómodo que se adapte al pie.
  • Cuidado diario de los pies  para evitar heridas, ampollas, grietas, rozaduras y erosiones que incluye:
    • Lavado diario con agua templada.
    • Secado sin frotar con toallas suaves.
    • Aplicar crema hidratante sin alcohol.
    • Mantener uñas cortas y limadas usando tijeras de punta roma.
    • Alejar los pies de fuentes de calor.
    • No usar calcetines que presionen o con goma.
    • Evitar andar descalzo.

¿Qué es el mal perforante plantar?

El mal perforante plantar también se le conoce como úlcera neuropática que es un tipo de lesión del pie diabético y se le considera la complicación más grave producida por la neuropatía diabética. Se localiza en las zonas que soportan más presión del pie y su inicio es indoloro por lo que suele detectarse ya en fases evolucionadas.