La enuresis nocturna o micción involuntaria, se define como la emisión incontrolada o pérdida de orina de forma repetida voluntaria o involuntariamente por el niño. Ocurren con frecuencia en la cama durante la noche en las horas de sueño. El niño puede tener dificultades para reconocer cuándo su vejiga está llena, incluso estando despierto, por lo que puede orinarse involuntariamente en cualquier momento del día o de la noche.
Para que sea considerada enuresis debe producirse por lo menos dos veces cada día durante un mínimo de tres meses consecutivos y en niños mayores de 4 años. Suele ser más frecuente en varones, a partir de los cinco años, y aparece con más frecuencia durante la noche y en las horas de sueño. Es muy común en los niños y tiene un pronóstico leve, aunque también dependerá de si está relacionado con alguna enfermedad que si no se trata a tiempo, podría llegar a ser grave.
La enuresis se puede clasificar de dos maneras según el momento que ocurra la pérdida de control de orina, y según el incio del problema.
Según el momento de la ocurrencia existen tres tipos que son:
Existen dos tipos de enuresis según el inicio del problema que son:
No se sabe con exactitud cuál es la causa de la enuresis. En la mayoría de los casos, la enuresis nocturna ocurre simplemente porque el niño duerme profundamente y no se despierta cuando su vejiga está llena. Es una patología hereditaria, por lo que, si uno de los progenitores ha tenido enuresis durante su infancia, las probabilidades de que sus hijos también la tengan son elevadas.
También cuando el niño está experimentando un alto nivel de estrés debido a un cambio o una situación, por ejemplo, divorcio de los padres, muerte de alguno de los padres, llegada de un hermano menor, cambio de ciudad o colegio, miedo, maltrato, problemas familiares o en la escuela, etc.
También el sueño alterado. Si el niño está muy cansado por la noche, le resulta más difícil levantarse. En el caso de algunas personas que padecen enuresis, el exceso de espasmos musculares puede impedir que la vejiga retenga una cantidad normal de orina. Algunos adolescentes y adultos también tienen vejigas relativamente pequeñas que no pueden retener un gran volumen de orina.
Algunas afecciones médicas que pueden dar origen a la enuresis secundaria son la diabetes, la constipación (estreñimiento), alteración hormonal, enfermedad en los riñones y las infecciones del tracto urinario. Los traumas en la médula espinal, como un estiramiento grave de la médula a causa de una caída, una lesión en un deporte, un accidente de automóvil o cualquier otro accidente, también pueden desempeñar un papel en la enuresis.
El principal síntoma de la enuresis es la pérdida de orina involuntaria. Ésta puede ocurrir varias veces durante la noche, periodo en el que pueden ser muy abundantes. También pueden tener dificultad para despertarse y sufrir de estreñimiento.
En un gran porcentaje de niños, la enuresis desaparece de forma espontánea antes de los 6 años de edad. Si se necesita tratamiento, se puede planificar en función del análisis de las opciones con el médico y la identificación de lo que será más adecuado para la situación.
El mejor tratamiento para evitar estas incontinencias es que el paciente siga rutinas como miccionar antes de irse a la cama, llevar la cuenta de las noches que moja o no la cama y no beber líquidos desde dos o tres horas antes de acostarse.
Además, existen las alarmas de enuresis, que se trata de un detector de humedad con una eficacia de un 80%. Éstas despiertan al niño con un sonido. Se recomienda seguir usandola 3 meses después de la última incontinencia.
Se recomienda el uso de desmopresina análogo sintético de la vasopresina (tratamiento farmacológico), que disminuye el volumen de líquido nocturno (mientras se duerme), o la oxibutinina que actúa aumentando la capacidad de la vejiga.
Para el diagnóstico y tratamiento de la enuresis nocturna es necesario:
No se conocen factores que puedan desencadenar esta afección. .
Los factores que aumentan el riesgo de tener enuresis nocturna son: el estrés o la ansiedad, factor hereditario, si uno de los padres del niño o ambos mojaban la cama cuando eran niños su hijo tiene una probabilidad alta de hacerlo también. La enuresis es más frecuente en niños que tienen un trastorno de déficit de atención con hiperactividad, sueño alterado, y es más en varones.
Las complicaciones de la enuresis nocturna incluyen:
La mejor forma de prevenir la enuresis es:
La enuresis nocturna pertenece a la especialidad de pediatría. La pediatría es la parte de la medicina que se ocupa del estudio del crecimiento y el desarrollo de los niños hasta la adolescencia, así como del tratamiento de sus enfermedades.
La diferencia de la enuresis y la encopresis es que, la enuresis se refiere cuando existe un problema de falta de control de la orina y la encopresis hace referencia a la falta de control de la defecación (heces).
Se mencionan diversos remedios naturales para tratar la enuresis, como son, los arándanos que se dice tienen propiedades astringentes y ayudan con las infecciones de orina, el maíz y anís que incrementan el contenido de la vejiga, hierbas de San Juan y melisa que actúan como tranquilizantes para calmar el niño durante la noche, canela, hinojo, la aromaterapia y la homeopatía. Sin embargo, lo más recomendable es acudir al médico especialista para tratarlo debidamente y consultar si es recomendable usar estos remedios naturales.
La enuresis diurna es la incontinencia urinaria (emisión involuntaria de la orina) que tiene el niño durante el dia.
Existen diferentes causas por las que el niño se orina en la cama que son: