Descarga la aplicación
google play storeapple store


  1. Savia
  2. Contenidos de salud
  3. Riesgos de adelgazar rápido

Riesgos de adelgazar rápido

Regístrate y recibe un mes de servicios ilimitados gratuitos en Savia
videoconsulta 24 horasVideoconsulta 24 horas
chat médico 24 horasChat médico 24 horas
evaluador de síntomasEvaluador de síntomas
Regístrate ahora gratis

¿Qué consecuencias puede tener adelgazar rápido?

Perder peso en poco tiempo es algo muy poco equilibrado para nuestro organismo, ya que, este no se logra adaptar rápidamente a un déficit calórico importante, lo que puede traer consecuencias irreparables como:
nuestro organismo no se logra adaptar rápidamente a un déficit calórico importante, lo que puede traer consecuencias irreparables

  • Deshidratación: existen algunas dietas que centran su pérdida acelerada de peso en la deshidratación, pero esto es una “falsa pérdida de peso”, ya que, al ingerir nuevamente líquidos, el peso se recupera. La pérdida de agua puede traer consecuencias a nivel cardiovascular y renal que se expresa en hipotensión, taquicardia, fatiga crónica, cefalea, problemas para regular la temperatura corporal y alteraciones de la función renal, que, si permanecen en el tiempo, pueden originar enfermedades renales crónicas.
  • Lesiones musculares: en la pérdida de peso de forma rápida y en poco tiempo, puede estar implicada la pérdida de masa muscular como fuente de proteína para el cuerpo. Además, puede estar acompañado de excesivo ejercicio con mayor predisposición a lesiones agudas y crónicas osteomusculares y a fracturas óseas por pérdida de nutrientes.
  • Alteraciones gastrointestinales: la disminución de la ingesta de alimentos puede traer como consecuencias alteraciones en la motilidad y absorción gastrointestinal, que se expresan como estreñimiento o diarrea, dolor abdominal y flatulencias.
  • Alteraciones del humor y dolores de cabeza: en su mayoría, son provocados por dietas altamente restrictivas calóricas en las que prevalece el cansancio, fatiga crónica, irritabilidad y decaimiento.
  • Trastornos de alimentación: en el intento de perder peso de manera rápida corremos el riesgo de convertir nuestro ideal en una obsesión, creándose situaciones que ponen en riesgo nuestra vida, en la que, a pesar de encontrarnos en el peso ideal, tenemos una percepción errónea de nuestro cuerpo.
  • Fatiga crónica: se produce como respuesta del organismo a la restricción de calorías y deshidratación, con alteraciones en el sistema nervioso central, específicamente a nivel parasimpático, ocasionando un estado de “mantenimiento de reservas” que conlleva la aparición de cansancio, insomnio e irritabilidad como síntomas más importantes. 
  • Efecto rebote: una vez llegado al peso ideal y abandonado la dieta restrictiva que nos originó la pérdida de peso en pocos meses (la mayoría son hipocalóricas sin carbohidratos), cuando intentamos incorporar los carbohidratos a nuestra dieta, nos damos cuenta que recuperamos el peso perdido, en ocasiones, con la misma rapidez de su pérdida.
  • Cálculos biliares: hasta un 20% de las personas que pierden peso rápidamente pueden presentar cálculos biliares que precisen su resección quirúrgica posteriormente.

¿Qué tipo de dietas se deben evitar?

En general, debemos evitar aquellas dietas que originen desequilibrio en nuestro organismo, normalmente las dietas que permiten perder mucho peso en poco tiempo han sido fuertemente criticadas por nutricionistas y médicos porque suponen un grave riesgo a la salud, por el déficit de vitaminas y nutrientes que originan. Algunos de los peligros que debemos evitar por estas dietas son los siguientes:

  • Disminución de la masa muscular, estreñimiento/diarrea, dolores de cabeza, fatiga, mareos, sobrecarga renal, desmineralización ósea y alteraciones renales en dietas hiperproteicas o hiperlipidemias y bajas o nulas en hidratos de carbono.
  • Desnutrición, efecto rebote y deshidratación en monodietas o dietas de choque que consisten en comer un único alimento durante un tiempo determinado (alcachofas, piña, repollo, sirope o similares).
  • Hipoglucemia, pérdida de masa muscular y desnutrición con técnicas de ayuno que pueden ser intermitentes o absolutas.
  • Alteraciones cardiovasculares, metabólicas y renales con el uso de pastillas estimulantes, quemadores o supresores del apetito, los cuales suelen venderse como un método extraordinario y milagroso con efectos secundarios que pueden comprometer la vida del paciente y conseguir escasa reducción de la masa grasa.

¿Pueden los complementos alimenticios suponer un problema para mi salud?

Los alimentos light o bajos en azúcares o grasas pueden suponer un problema para la salud si son consumidos de manera descontrolada, ya que:

  • El hecho de que sea baja en grasa, a veces, es compensada por mayores cantidades de sal, azúcar o almidón que el producto de referencia para que no pierda su sabor.
  • Al consumir alimentos bajos en grasas o carbohidratos, sentimos que podemos permitirnos comernos el doble de las raciones y duplicamos la cantidad de calorías.
  • Al consumir el producto reducido en grasa o carbohidrato, no se altera significativamente el peso ni las calorías consumidas, solo la proporción del grupo al cual pertenece el alimento, por lo que el alimento en sí no adelgaza sino es la disminución en la ración del alimento.

Por tanto, es importante el consumo responsable de estos productos, leer bien el etiquetado de cada uno de ellos y, ante cualquier duda, consultar al médico o al nutricionista.

¿Cómo puedo bajar peso de manera saludable?

La mejor manera de bajar de peso es acudir a un especialista que después de evaluar la historia médica, un examen físico y realizar un historial nutricional, creará un plan de alimentación personalizado basado en tus requerimientos nutricionales según edad, sexo y estatura, creando metas a corto y mediano plazo y asociando a este programa la realización de ejercicio físico. Algunos tips importantes para tener en cuenta:

  • Seleccionar alimentos frescos
  • Complementar el plan nutricional con ejercicios acorde a nuestra condición física
  • Comer a diario 5 raciones de frutas y verduras
  • Mantener una correcta hidratación
  • Realizar alimentación consciente, esto significa comer sin ver televisión, ordenador o cualquier tipo de pantallas