La mastectomía es un procedimiento quirúrgico que se realiza para extirpar tejido mamario de origen sospechoso maligno. La reconstrucción posterior se puede realizar en el mismo acto quirúrgico o bien en una fecha posterior, así como de forma uni o bilateral. Es una opción de tratamiento en diferentes tipos de cánceres: carcinomas ductal in situ, cáncer de mama estadios I, II (temprano), III (post-quimioterapia), enfermedad de Paget, y cáncer de mama inflamatorio.
Es un procedimiento quirúrgico interdisciplinario, que puede realizarse por cirujanos generales, ginecólogos o cirujanos plásticos.
Se realizará una mastectomía cuando la paciente presente dos o más tumores, depósitos de calcio, recurrencia, embarazo y cáncer de mama, mutaciones genéticas, y enfermedades del tejido conectivo y cáncer de mama.
El cáncer de mama se diagnostica en un inicio mediante mamografía, ecografía o RMI; y se confirma mediante biopsia; la cual determina el grado del tumor. Existen tres grados, del 1 al 3, de menor a mayor riesgo de que las células sean cancerígenas. Existen también pruebas genéticas (receptores de progesterona y estrógeno, y HER2), que determinan el riesgo de recurrencia y el efecto de los fármacos quimioterapicos.
La mastectomía preventiva (profiláctica), implica retirar ambos senos y reducir considerablemente el riesgo de contraer cáncer de mama en el futuro. Está reservada para mujeres con un riesgo muy alto de cáncer de mama, con fuertes antecedentes familiares o presencia de mutaciones genéticas.
Durante los últimos años, la tasa de demanda de mastectomía profiláctica se ha incrementado debido al llamado “efecto Angelina Jolie”. En el año 2013, la actriz sorprendió al mundo cuando reveló que se había sometido a una doble mastectomía preventiva para evitar el cáncer de mama, y a la extirpación de los ovarios y trompas de Falopio en forma bilateral. Presentaba un gran componente familiar, y un alto componente genético, que la ponía en situación de riesgo de padecer cáncer de mama.
Al hacer pública su decisión, se produjo un incremento del número de mujeres que solicitaban someterse a las mismas pruebas. Toda prevención debe estar regulada y controlada por el profesional a cargo del estudio de la paciente, para evitar confusiones y cometer errores.
La mastectomía profiláctica presenta determinadas indicaciones: cáncer recurrente, antecedentes familiares, mutaciones genéticas de BRCA1 y 2, carcinoma lobular in situ, mamas densas, y antecedentes de radiación torácica en la infancia.
Se debe realizar un examen exhaustivo de la paciente, determinando el tipo de mastectomía a realizar y, también, las posibilidades de reconstrucción inmediata o diferida. Existen diferentes tipos de mastectomía:
La reconstrucción mamaria inmediata o diferida, realizada por un cirujano plástico o reconstructivo, se puede realizar de diferentes maneras:
Debe realizarse siempre en espacio estéril quirúrgico, con anestesia general y con estancia hospitalaria con control multidisciplinario. Los efectos secundarios posibles de una mastectomía incluyen infección, dolor, sangrado, inflamación de brazos, hematomas, dolor y rigidez.
¿Qué es la biopsia de ganglio centinela?
Permite conocer si el cáncer de mama se ha extendido. Puede realizarse una extirpación total de los ganglios axilares, o realizarse una biopsia del primer o segundo ganglio a donde drena el tumor (ganglios centinelas). Si hay cáncer se resecarán todos los ganglios o se hará radioterapia. Si no hay, no es necesario. Previamente, se inyectará una sustancia azul que marcará los ganglios y permitirá localizarlos rápidamente para extirparlos.
Tras el procedimiento, todo el material obtenido se estudia, y la paciente es vendada en el postoperatorio inmediato, con colocación de uno o dos drenajes (si es bilateral); los cuales se retirarán cuando el débito de sangre sea de 30 cm3 o menor. El vendaje debe ser compresivo, para evitar inflamación y morados. En los primeros 10 a 15 días la paciente no moverá los brazos en exceso, y no realizará esfuerzos (sobre todo si se realiza vaciamiento ganglionar axilar); y deberá ser controlada semanalmente por el cirujano.
De acuerdo a los resultados obtenidos, el cirujano puede contactar a otros profesionales, como oncólogos, cirujanos reconstructivos, o grupos de autoayuda para la paciente.
Siempre se debe evaluar cada caso en particular, con un equipo multidisciplinario, explicando a la mujer y su familia las posibles soluciones y también los riesgos para cada caso particular. Es importante realizar un control anual ginecológico obligatorio, para descartar cualquier patología.