Descarga la aplicación
google play storeapple store


Gonalgia

Regístrate y recibe un mes de servicios ilimitados gratuitos en Savia
videoconsulta 24 horasVideoconsulta 24 horas
chat médico 24 horasChat médico 24 horas
evaluador de síntomasEvaluador de síntomas
Regístrate ahora gratis

Actualizado el 04/07/2022

Las complejas características anatómicas de la rodilla determinan que se trate de una articulación frecuentemente afectada por traumatismos, así como por procesos inflamatorios y degenerativos. El dolor es un síntoma también frecuente en la rodilla.

Una lesión en la rodilla puede afectar a cualquiera de los ligamentos, tendones o bolsas sinoviales de la articulación.

¿Qué es la gonalgia?

La gonalgia es un término general que hace referencia a la aparición de dolor en la rodilla. Este puede estar causado por múltiples factores, incluyendo los de naturaleza traumática. Afecta a un 20-25% aproximadamente de la población adulta y su prevalencia ha aumentado un 65% en los últimos 20 años. No en vano, la rodilla es una de las estructuras del aparato locomotor más complejas, debido a la cantidad de estructuras que la componen. Juega una importancia primordial en la estabilidad y el desplazamiento, viéndose sometida a fuertes cargas y rápidos cambios de dirección.

La gonalgia puede aparecer junto a otros síntomas y signos:

  • Inflamación y
  • Enrojecimiento y aumento de la temperatura al
  • Sonidos de chasquidos, crujidos o sensación de
  • Incapacidad de realizar determinados movimientos con la articulación.

Las causas de la gonalgia se podrían dividir en dos grandes grupos:

  • Origen traumático. El traumatismo directo, la torsión excesiva de rodilla con pie fijo en suelo o la caída con golpe sobre las rodillas pueden producir desde una simple contusión, pasando por una lesión de ligamentos y meniscos, hasta una lesión ósea o procesos de recuperación tras una cirugía.
  • Origen no traumático. El dolor en la rodilla puede deberse a enfermedades como los procesos degenerativos, reumáticos o infecciosos. Entre ellos destacan la artrosis, artritis reumatoide (se produce destrucción de la articulación debido a mecanismos autoinmunes), gota o acumulación de cristales de ácido úrico y pseudogota por cristales de calcio, y artritis séptica por infección directa del espacio articular.

Posibles causas de gonalgia

La gonalgia puede ir asociada a una gran variedad de lesiones de rodilla afectando a cualquiera de los tejidos que forman parte de ella, incluyendo ligamentos, tendones o bolsas sinoviales de la articulación. Es por ello que una parte fundamental del proceso será realizar un diagnóstico diferencial exhaustivo. Dentro de estas lesiones las más habituales en consulta suelen ser:

  • Artrosis. Su existencia suele estar relacionada con la edad, aunque existen muchos otros factores. Es más común en adultos de entre 70 y 74 años. Los síntomas principales son el dolor que puede empeorar con el inicio de la marcha y la limitación del rango articular de la rodilla. Se trata de una patología de evolución
  • Procesos inflamatorios articulares. El signo característico es la tumefacción (inflamación). El examen físico puede mostrar si el proceso inflamatorio es extra o intraarticular.
  • Bursitis. Se trata de lesiones localizadas bien delimitadas en el caso de la Pueden aparecer en la zona anterior de la rodilla (bursitis pre rotuliana) o en la zona lateral (bursitis anserina).
  • Tenidopatía rotuliana. Un exceso de cargas repetitivas sobre el aparto extensor de la rodilla puede llegar a producir la aparición de los síntomas, que generalmente suele ser dolor en la cara anterior de la
  • Síndrome patelofemoral. Se trata de la principal causa de dolor en la cara anterior de la rodilla entre adolescentes y adultos menores de 60 años. Su causa es multifactorial y será fundamental realizar un buen examen y exploración.
  • Alteración intraarticular y ligamentosa. Suele acompañarse de antecedentes traumáticos y rotura de los ligamentos o meniscos de la rodilla. Esto origina derrame articular y sensación de inestabilidad, bloqueo de rodilla en semiflexión o incapacidad funcional.

Tratamiento de la gonalgia

El tratamiento de la gonalgia variará en función de su causa.

Fisioterapia

Las diferentes técnicas y herramientas de fisioterapia, así como una correcta administración y dosis de diferentes tipos de ejercicio y contracciones musculares en función de la patología, irán encaminadas en la reducción del dolor y en la rehabilitación de la lesión si fuera posible.

Tratamiento farmacológico

Tratamientos específicos. Medicamentos indicados propiamente para enfermedades como la gota o artritis reumatoide.

AINES. El uso y utilidad de los antiinflamatorios no esteroideos se limita a las fases agudas.

Inyecciones articulares. Puede incluir la inyección en la rodilla de corticoides, ácido hialurónico o plasma rico en plaquetas para reducir la inflamación y el dolor. También pueden mejorar la movilidad y favorecer la cicatrización.

Cirugía

En algunos casos, la cirugía es el único método para reparar el problema articular. Puede realizarse a través de artroscopia, con pequeñas incisiones, para reparar cartílago y ligamento. También puede realizarse cirugía abierta en el caso de reemplazo de rodilla.

Otras terapias

Otro tipo de terapias o estrategias para minimizar la gonalgia incluyen el reposo, la ortesis o empleo de plantillas especiales en algunas patologías degenerativas, vendajes funcionales, estimulación eléctrica y la disminución de peso.

Si una gonalgia no es tratada a tiempo puede ocasionar lesiones osteocondrales residuales y recurrentes con alteraciones en los mecanismos de extensión y flexión, lo que se traduce en importantes alteraciones de la movilidad y limitación funcional.

Preguntas frecuentes

¿Qué diferencia hay entre gonalgia y gonartrosis?

La gonalgia es un término que hace referencia al dolor en la articulación de la rodilla de forma general, generalmente como síntoma, en cambio, la gonartrosis, es una enfermedad articular crónica degenerativa y progresiva de la rodilla, que seguramente curse con gonalgia.

¿Se puede realizar ejercicio padeciendo gonalgia?

El ejercicio ha demostrado ser beneficioso en la mayoría de las lesiones de rodilla. Es importante −siempre que esté indicado para su patología− realizar los ejercicios sin dolor. La monitorización de la dosis, la carga y el dolor durante el ejercicio serán fundamentales para realizar una buena administración del mismo. Es recomendable que consulte con su médico o fisioterapeuta los distintos ejercicios y frecuencia, dado que una mala gestión puede ser perjudicial.

¿Cuáles son las pruebas complementarias en caso de gonalgia?

La mayoría de las patologías de rodilla pueden ser diagnosticados con la realización de una historia clínica, un examen físico y los estudios radiográficos pertinentes.

Tras realizar el examen físico articular, el médico traumatólogo puede indicar alguna de las siguientes pruebas diagnósticas:

  • Rayos Permite descartar enfermedades degenerativas y fracturas.
  • Tomografía axial computerizada (TAC). Este método permite obtener imágenes radiográficas desde diferentes planos.
  • Ecografía. Produce imágenes en tiempo real de las estructuras del tejido blando del interior y alrededor de la rodilla.
  • Resonancia Magnética. Puede ser de utilidad para lesiones de ligamentos, cartílagos, músculos, tendones y tejido óseo.
  • Análisis del líquido articular. El examen del líquido sinovial puede ser útil en diversos procesos como la artritis infecciosa y las artritis infecciosa y las artritis microcristalinas.

Referencias y bibliografía

  1. Bunt, W., Jonas, C. E., & Chang, J. G. (2018). Knee Pain in Adults and Adolescents: The Initial Evaluation. American family physician, 98(9), 576–585.
  2. Farha, N., Spencer, A., & McGervey, M. (2021). Outpatient Evaluation of Knee The Medical clinics of North America, 105(1), 117–136.
  3. Michael, W., Schlüter-Brust, K. U., & Eysel, P. (2010). The epidemiology, etiology, diagnosis, and treatment of osteoarthritis of the knee. Deutsches Arzteblatt international, 107(9), 152–162.
  4. Rishor-Olney, R., & Pozun, A. (2022). Prepatellar Bursitis. In StatPearls. StatPearls Publishing.
  5. Malliaras, , Cook, J., Purdam, C., & Rio, E. (2015). Patellar Tendinopathy: Clinical Diagnosis, Load Management, and Advice for Challenging Case Presentations. The Journal of orthopaedic and sports physical therapy, 45(11), 887–898.
  6. Figueroa, D., Figueroa, F., & Calvo, R. (2016). Patellar Tendinopathy: Diagnosis and The Journal of the American Academy of Orthopaedic Surgeons, 24(12), e184–e192.
  7. Gaitonde, Y., Ericksen, A., & Robbins, R. C. (2019). Patellofemoral Pain Syndrome. American family physician, 99(2), 88–94.
  8. Petersen, W., Ellermann, A., Gösele-Koppenburg, A., Best, R., Rembitzki, I. V., Brüggemann, G. P., & Liebau, C. (2014). Patellofemoral pain syndrome. Knee surgery, sports traumatology, arthroscopy : official journal of the ESSKA, 22(10), 2264–2274.