La distocia o parto distócico forma parte de las complicaciones que se pueden producir durante el alumbramiento. En este caso, relacionadas con la disposición del bebé y el canal y el trabajo de parto.
La distocia o distocias son anomalías en la progresión del trabajo de parto.
Estas anomalías en la progresión del parto suelen afectar a cerca del 20% de los nacimientos. El principal factor de riesgo para que se produzcan es que la mujer sea primípara.
La distocia fetal puede deberse a un tamaño anormalmente grande o una disposición o colocación especial dificultosa para el parto.
Cuando un parto se prolonga o queda detenido por causas como la distocia, una de las posibles soluciones es la práctica de una cesárea de urgencia.
La distocia fetal tiene lugar cuando el feto es demasiado grande para el estrecho superior de la pelvis o su posición es anormal. De este modo, los tipos de distocia que se pueden presentar incluyen:
Se trata de una condición infrecuente en la que el hombro fetal anterior queda atascado detrás de la sínfisis pubiana después de la salida de la cabeza, requiriendo maniobras obstétricas adicionales para producir la expulsión fetal tras la salida de la cabeza.
Los riesgos de lesiones del plexo braquial o fracturas óseas, así como la mortalidad neonatal aumentan. Para la madre, puede determinar la aparición de hemorragia posparto, lesiones perineales y del esfínter, separación de la sínfisis del pubis y neuropatía cutánea femoral lateral asociada con la hiperflexión de las piernas.
Los factores de riesgo para que se produzca la distocia de hombros incluyen:
Una vez identificada la distocia de hombro deben ponerse en práctica varias maniobras para desencajar el hombro, incluyendo la hiperflexión de los muslos de la mujer, la compresión suprapúbica para rotar y desencajar el hombro y la introducción de una mano en la cara posterior de la vagina para flexionar el hombro fetal para rotar al feto en la dirección que resulte más sencilla. La última maniobra sería colocar a la madre en posición de cuadripedia (siempre y cuando las extremidades inferiores no se encuentren bajo los efectos de la anestesia epidural).
Cuando las maniobras resultan ineficaces, se revierten los movimientos del trabajo de parto, recolocando la cabeza en la vagina o el útero para proceder a una cesárea.
Las principales causas de la aparición de distocia incluyen:
El diagnóstico de una distocia se lleva a cabo mediante el examen y la respuesta al trabajo de parto.
Para ello, la monitorización del parto se lleva a cabo mediante el registro cardiotocográfico, técnicas ecográficas y tacto vaginal.
La desproporción feto-pelviana se puede anticipar a partir de las estimaciones clínicas prenatales de las dimensiones pélvicas y la presencia de un trabajo de parto prolongado.
En cualquier caso, determinadas presentaciones anómalas del feto durante el parto son difíciles de diagnosticar hasta que la dilación no se ha completado.
Finalmente, el tratamiento o resolución de las distocias tiene como finalidad que el parto tenga lugar con el menor perjuicio posible tanto para el feto como para la madre. Principalmente, se utilizan maniobras físicas de reposicionamiento del feto, la elección de un parto vaginal operatorio instrumental o el parto por cesárea.