Los primeros síntomas de la gripe aparecen de manera brusca y suelen ser escalofríos y fiebre elevada, a los que se añade dolor de cabeza, dolor de garganta, tos y malestar general con dolor muscular y articular.
También pueden aparecer náuseas, vómitos y falta de apetito.
La gripe no tiene tratamiento y sólo está indicado tomar medicación para aliviar los efectos de los síntomas, como puede ser administrar los medicamentos:
Las dosis más empleadas son 500 mg, 650 mg y 1g, que se pueden administrar en forma de comprimido, polvo granulado para beber, comprimidos efervescentes, solución oral o en supositorio. No daña al estómago, pero hay que tener cuidado por sus efectos dañinos sobre el hígado cuando hay un consumo excesivo.
Las dosis más utilizadas son 400 mg y 600 mg, pero es dañino para el estómago, por lo que es recomendable tomarlo con las comidas o con un protector del estómago.
Se puede administrar en comprimidos, soluciones orales o soluciones granuladas que se disuelven en agua.
Se pueden aplicar remedios caseros para la gripe como pueden ser:
La gripe es una enfermedad causada por el virus influenza, que afecta al aparato respiratorio y produce una serie de síntomas generales muy característicos. Aparece en brotes u oleadas durante los meses de invierno. Es una afectación a nivel mundial.
Es importante diferenciarla de un resfriado común, con la que comparte los mismos síntomas. La gripe es una enfermedad infecciosa de aparición brusca, mucho más intensa, debilitante, con fiebre elevada y cuyos síntomas pueden durar una o dos semanas. El resfriado tiene una aparición gradual, de más corta duración y apenas cursa con fiebre.
No existe tratamiento para la gripe, solo se puede actuar para tratar los síntomas.
Explicado en el apartado “Cómo quitar los síntomas de la gripe”
Es recomendable seguir una serie de consejos para prevenir la gripe como son: