Una biopsia es un procedimiento médico mediante el cual se extrae una muestra de tejido o células del organismo para su posterior estudio mediante microscopio. Este estudio permite establecer el diagnóstico de la lesión a estudiar, por ejemplo, si se trata de un tumor y si éste es benigno o maligno. También se utiliza para el diagnóstico de enfermedades, como las de origen autoinmune (enfermedad de Crohn, enfermedades reumatológicas).
La biopsia se puede aplicar a cualquier parte del cuerpo, tanto en la superficie (biopsia de piel) como en el interior de los órganos (biopsia de colon), si bien en función de la anatomía de la zona a biopsiar, el tamaño y accesibilidad de la lesión y el riesgo (dificultad del procedimiento) puede variar su indicación. Por ejemplo, en determinadas localizaciones como el tronco cerebral, la biopsia puede suponer un gran riesgo y presentar una gran dificultad de realización.
Tipos de biopsia
Para obtener la muestra de tejido o células existen diferentes tipos de biopsia, las cuales pueden variar en función de la zona anatómica y el tipo de muestra que se requiera.
- Biopsia por raspado: consiste en la obtención de una capa superficial de células mediante un utensilio similar a una cuchilla. Se indica en las lesiones cutáneas y ginecológicas (cérvix).
- Biopsia en sacabocados o con Punch: se realiza con un cilindro hueco de bordes afilados que toma una muestra circular de piel de pocos milímetros de diámetro. Se utiliza en dermatología para lesiones cutáneas.
- Biopsia escisional: con el uso del bisturí se obtiene toda la lesión junto con la piel. Se indica para estudio de lesiones cutáneas o de ganglios aumentados de tamaño.
- Biopsia endoscópica: extracción de una muestra de tejido mediante una pinza que se introduce a través del endoscopio. El endoscopio es un tubo flexible con una cámara en la punta que permite visualizar la lesión y tomar muestras directamente. Esta técnica se emplea sobre todo en las lesiones gastrointestinales (estómago, colon).
- Biopsia por punción: mediante esta técnica la obtención de tejido es a través de la inserción de una aguja.
Con aspiración con aguja fina (PAAF): se utiliza una aguja de fino calibre (similar a las de un análisis de sangre) y se extrae una cantidad de líquido que contiene las células de la zona a estudiar. El problema principal es que la muestra obtenida puede ser insuficiente.
Biopsia con aguja gruesa (BAG): se diferencia de la anterior en que se utiliza una aguja hueca y de calibre más grande con lo cual se pueden obtener cilindros de tejido (no sólo células). Requiere de anestesia local. Tiene mayor rendimiento diagnóstico que la PAAF.
Este tipo de biopsias se indican generalmente para el estudio de lesiones de mama, de hígado o de tiroides.
- Biopsia dirigida por imagen: cualquier tipo de biopsia en la que se utiliza una técnica de imagen (ecografía, RM…) para identificar la lesión y asegurar que la extracción de la muestra se hace en la zona correcta. Es la forma habitual de realización de biopsia en los tumores de próstata.
- Biopsia quirúrgica: implica la resección de la lesión en quirúrgica por el cirujano. Generalmente hay una localización y marcaje previo de la lesión mediante técnicas de imagen, colocándose un marcador (“arpón”), en la imagen obtenida.
¿Cuándo se solicita?
Una biopsia está indicada en el proceso diagnóstico para establecer la naturaleza de una lesión (tumor, reacción inflamatoria, etc.) o para el diagnóstico de enfermedades, especialmente de origen inflamatorio o autoinmunes como la enfermedad inflamatoria intestinal, pénfigo, lupus, etc.
¿Qué es importante saber?
Para optimizar los resultados de la biopsia se deben tener en cuenta varios factores:
- La muestra tiene que ser suficiente (tener un tamaño mínimo) y ser, en la medida de lo posible representativa. En algunos casos, si esto no se cumple, puede ser necesario repetir la prueba.
- La conservación y el procesamiento de la muestra deben ser adecuados siguiendo un protocolo establecido.
- Algunas biopsias son más complicadas de analizar y además precisan de tinciones especiales o determinaciones genéticas más complejas. Por ello, también el tiempo de entrega de los resultados puede variar.
- La anatomía patológica (rama de la medicina) que se encarga del estudio de las biopsias es muy complicada. No es infrecuente que una biopsia tenga un diagnóstico diferente tras ser valorada por dos patólogos y que se requieran revisiones para confirmar el diagnóstico.
Nuevos tipos de biopsia y aplicaciones
- La biopsia líquida es una nueva técnica que permite un nuevo enfoque en la biopsia tumoral clásica.
- Se basa en la detección de fragmentos tumorales en líquidos corporales (sangre, orina, saliva o líquido cefalorraquídeo), evitando la punción del tejido.
- Los tumores pueden extenderse a otras zonas del cuerpo (metástasis) lo que da lugar a liberación de material genético en el organismo. La detección de este material genético permite realizar el seguimiento y determinar mutaciones específicas para un tratamiento dirigido en algunos tipos de tumores.
- De momento, la biopsia es una práctica con limitaciones, pero prometedora. Donde se está utilizando es en el cáncer colorrectal metastásico.